Una década en un partido
Los aficionados de la UDL llevan diez años esperando partidos como este. La posibilidad de jugar, por vez primera en su corta historia, una final por el ascenso a Segunda pasa por derrotar a partir de las 18.30, por dos goles o más al Hércules, un club histórico acostumbrado a tardes como ésta.
El 3-1 de Alicante no ha hecho mella en el ánimo de los jugadores ni en una afición que poblará Las Gaunas. Se esperan más de diez mil aficionados en el encuentro no sólo del año sino de la década.
Con la necesidad de ganar y no encajar, Sergio Rodríguez debe decidir si opta, desde el inicio, por situar dos delanteros (Ander Vitoria y Marcos André, con Oussama en el banco) o prefiere controlar las emociones y optar por un dibujo más ‘equilibrado’. La presencia de Iván Buigues en el once no se discute, en principio.
La UDL, el segundo mejor reparto defensivo de la categoría en la liga regular, ha visto como en los últimos 180 minutos recibía seis goles. Los tres primeros no impidieron su clasificación para semifinales. Los recibidos en el Rico Pérez le obligan a firmar un partido «perfecto» para tumbar a un Hércules que, hasta el pasado domingo, andaba peleado con el gol. Eso sí, el 3-1 da alas a los de Planagumá que saben que sus opciones pasan por mantener la firmeza defensiva de la que han hecho gala durante todo el curso (26 goles recibidos en liga y ‘play off’), conscientes de que arriba Carlos Martínez y Benja esperarán su oportunidad.
Sergio Rodríguez cree, sus jugadores animan la remontada y la afición sueña con una tarde de gloria. Habrá que ver qué dice el Hércules.






