Las técnicas de alta resolución reducen a la mitad las visitas a especialista

La apuesta por las últimas técnicas de alta resolución reduce casi a la mitad las visitas al especialista en La Rioja y las interconsultas entre médicos de Atención Primaria y Especializada han evitado el desplazamiento de más de dos mil pacientes, ha afirmado este lunes la consejera de Salud, María Martín, quien se ha reunido con profesionales de los servicios de Alergología, Neumología, Cardiología, Radiología, Ginecología, Oftalmología y Dermatología, entre otros.

«La alta resolución permite resolver en una sola visita la consulta del paciente gracias, entre otros, a las técnicas más avanzadas que posibilitan realizar pruebas en el mismo día. De este modo, se evita que los usuarios deban desplazarse una segunda vez para la misma consulta médica», ha indicado la consejera a través de una nota del Gobierno de La Rioja.

En el Hospital San Pedro, en 2016, se registraron 190.248 primeras consultas con especialistas, de las que 83.213 fueron de alta resolución, lo que supone que un 43,7 % del total se resolvió en el momento.

El proceso en este tipo de visitas conlleva pruebas que no necesitan preparación previa del paciente o que permiten intervenciones leves con anestesia local, por lo que no se genera la necesidad de consultas posteriores en la mayoría de los casos.

Martín ha afirmado que la gran apuesta por la alta resolución que ha hecho la Consejería de Salud se debe a su objetivo de «facilitar todo lo posible los procesos médicos a los pacientes riojanos y que su vida diaria se vea afectada lo menos posible».

«Con este tipo de consultas -ha dicho- no solo se pretende optimizar el tiempo de los usuarios evitándoles nuevos desplazamientos, sino que también se busca resolver las dudas del paciente en el mismo día para que pueda volver a su casa con respuestas y sin incertidumbres sobre su salud».

Ha recordado que «el centro del sistema sanitario riojano es el paciente, trabajamos por y para mejorar su calidad de vida y cada paso en este sentido por pequeño que sea para nosotros es un gran triunfo».

Para ella, «este tipo de medidas son un claro y real ejemplo de como conseguimos adaptar el sistema al ciudadano»; además de que este modelo asistencial también supone una mejora en las condiciones de trabajo de los especialistas, que ven optimizado su trabajo y, con ello, se incrementa su tiempo para «dedicarlo a nuevos pacientes que requieran una mayor atención».

Interconsultas online

La consejera también se ha referido a que la puesta en marcha de las interconsultas online entre médicos de Atención Primaria y Especializada han evitado un importante número de desplazamientos «innecesarios» de los pacientes riojanos.

Estas conversaciones entre profesionales se basan en compartir pruebas, dudas farmacológicas, diagnósticos, entre otras acciones, para resolver un problema del paciente y decidir entre ambas partes si es conveniente la visita al especialista o puede solucionarse desde su propio centro de salud.

Sus datos indican que, en 2016, este tipo de consultas a los servicios de Hematología y Neurología evitaron el desplazamiento de 345 pacientes; y las dudas resueltas por parte de los especialistas de Digestivo y Nefrología consiguieron que 1.580 usuarios no tuvieran que ir más allá de su centro de salud.

Ha relatado que, desde marzo de 2016, en Cirugía Maxilofacial se hace una valoración de los pacientes con las imágenes remitidas desde el odontólogo y, con estas pruebas, se cita para quirófano, lo que evita otra visita y ha beneficiado a 155 pacientes.

Además, la incorporación de las pruebas para los preoperatorios en los centros de salud de Nájera, Haro y Santo Domingo de la Calzada ha evitado, al menos, dos desplazamientos a 1.175 usuarios que debían llevar a cabo las pruebas y la consulta con el anestesista.

Martín ha destacado que los médicos de Atención Primaria pueden solicitar directamente espirometrías a sus pacientes, una prueba que se realiza en el CARPA y es informada por un neumólogo del Hospital San Pedro.

Ello evita que el paciente acuda al neumólogo para que le indique la necesidad de la prueba y, posteriormente, tenga que volver para llevarla a cabo, según el consejera, quien ha precisado que la actividad registrada en este caso ha sido de 1.129 espirometrías en 2016, un 38 % más que el año anterior.