El sueño del Naturhouse se traslada a Bursa

NR / LOGROÑO

El Naturhouse ya está en Bursa en busca de casi un imposible, clasificarse para las semifinales de la Copa Challenge, tercera competición continental. Para ello tendrá que derrotar, en cuatro sets (debe ganar por 0-3 ó 1-3 y hacerlo igualmente en el ‘set de oro’), al Bursa, campeón del torneo hace dos años y habitual del podio de la Challenge que hace quince días, en el Palacio, se impuso por 1-3, resultado que no hizo justicia a los méritos de las riojanas. Pero, pese a las dificultades de la empresa, el Naturhouse sueña con dar la campanada en el Pabellón Cengiz Göllü de Bursa (este martes a partir de las 16 horas), con arbitraje del ucranio Oleksey Skibitskyy y del búlgaro Vanya Parvanova.

André Collin, técnico del Naturhouse, es consciente de que la remontada es posible. Basta con repetir la imagen del partido de ida y afinar en errores puntuales que hipotecaron la suerte de la eliminatoria: «Sigo pensando que no hicimos el partido perfecto. Si lo mejoramos, sin errores en el saque como tuvimos en el Palacio, podemos dar la sorpresa».

El planteamiento del Naturhouse para sorprender al Bursa, que nuevamente estará liderado por la brasileña Joycinha, será «el mismo de la ida». «La ilusión está intacta. Nos enfrentamos ante un equipazo pero sabemos que, si tenemos el día, les podemos plantar cara como hicimos en el Palacio».

El preparador brasileño asume que el partido de esta tarde «es único». «Vamos a disfrutar de un ambiente único de voley. Le he dicho a mis jugadoras que quizás no podamos repetir esta experiencia, por eso tenemos que jugar con espíritu de equipo, estar concentradas, unidas y motivadas al cien por cien».

Aunque el equipo otomano, en la ida de los cuartos de final, fue superior al Naturhouse, sí que es cierto que las turcas tuvieron el viento de cara en un par de decisiones arbitrales que, si bien no decidieron la suerte de la contienda, sí que damnificaron los intereses de las logroñesas. André Collin asume que sí que hubo errores «pero no quiero opinar de los árbitros». «Sé que se esfuerzan por hacer bien su trabajo aunque tengo la sensación de que siempre se equivocaron en contra de nosotros. Eso generó tensión e indefensión en las jugadoras, pero no podemos hacer nada», lamentaba.

El equipo, pese al 1-3 de la ida, está convencido de que la victoria es posible. De momento, en la mañana del domingo, en su regreso a la Superliga Femenina dio cumplida cuenta del Voley Playa Madrid, al que sometió por 3-0 (3-25, 14-25 y 21-25). El Haro Rioja Voley, además, consolidó su tercera plaza tras derrotar al Barça por un plácido 3-0 (25-21, 25-19 y 25-12).