La Rioja registra baja natalidad, fuerte envejecimiento y ligera feminización
Efe / Logroño
La demografía de La Rioja, con 312.815 habitantes el uno de enero de 2016, lo que supone un ligero descenso por cuarto año consecutivo, pivota sobre una baja natalidad, un fuerte envejecimiento de la población, una ligera feminización y una tendencia a la baja de personas que abandonan la región.
Estas son algunas de las conclusiones de la publicación ‘Principales características demográficas de La Rioja 2016’, presentada este miércoles, en una rueda informativa, por el consejero de Administración Pública, Alfonso Domínguez, y la directora del Instituto de Estadística de La Rioja, Natalia Ríos.
El consejero ha indicado que «el Gobierno de La Rioja está trabajando para abordar el reto demográfico desde un enfoque integral y reducir su impacto, tanto en términos de sostenibilidad del estado de bienestar como en las consecuencias que puede provocar el descenso de población en las zonas rurales».
«Estas características demográficas condicionan las políticas del Gobierno de La Rioja para tratar de hacer frente al reto demográfico», ha afirmado Domínguez.
Para él, «algunas de las principales medidas del Ejecutivo están dirigidas a sostener el modelo de bienestar, incentivar la natalidad, asegurar la población en nuestras zonas rurales y reconducir los flujos migratorios».
Ha insistido en que, con el fin de llevar a cabo estas políticas, que dependen directamente de la gestión de las comunidades autónomas, se necesitan recursos y, para ello, «es preciso no solo una política económica que genere empleo, sino también un nuevo sistema de financiación autonómica».
El consejero ha reclamado un nuevo modelo que contemple la evolución del gasto sanitario y la atención a las personas dependientes y también que el sistema responda a los costes efectivos fijos de la prestación de servicios, que en el caso de La Rioja, por sus características de dispersión, baja densidad, y envejecimiento de la población son mayores que en otras regiones.
TENDENCIA A LA BAJA
Ha explicado que, a uno de enero de 2016, La Rioja tenía 312.815 habitantes, un 0,2 % menos que en 2015, que «prolonga la tendencia a la baja observada desde 2012, cuando se alcanzó el máximo de población con 320.951 habitantes».
Entre 2006 y 2016, la población riojana ha crecido un 3,3 %, al pasar de 302.697 a 312.815 habitantes, según el consejero, quien se ha referido a que, en 2016, el saldo vegetativo fue negativo en 361 personas, ya que, por segundo año consecutivo, el número de muertes fue mayor al de nacimientos.
Ello denota la baja natalidad de La Rioja, que es de 1,3 hijos por mujer en edad fértil, igual a la media nacional, y por debajo del 2,1 necesario para asegurar el reemplazo generacional.
A esto se suma el incremento «paulatino» de la esperanza de vida, que en La Rioja se sitúa en los 83,4 años, frente a la media nacional de 82,7.
Ha resaltado la mayor concentración de población se da en Logroño y su entorno; mientras que 132 localidades no superan los 500 habitantes y solo 17 registran diez o más nacimientos por cada 1.000 habitantes.
También ha citado «el cambio de tendencia a la baja que se viene experimentando en los últimos ejercicios en el número de personas que abandonan la región», ya que en 2015 se alcanzó la cifra más baja desde 2008, cuando se fueron al extranjero 393 personas más de las que llegaron.
Los movimientos migratorios con destino a La Rioja aumentaron un 4,8 % en 2015 y los de salida desde la comunidad riojana disminuyeron un 14,3 %.
La directora del Instituto ha detallado que la publicación señala que el 35,9 % de los riojanos tiene entre 16 y 44 años; el 28 %, entre 45 y 64 años; el 20,3 %, de más de 65; y el 15,8 %, menos de 15.
La distribución por edades de la población muestra un mayor envejecimiento de la población que la media nacional, lo que se refleja en la pirámide poblacional, propia de sociedades en las que la esperanza de vida es larga y nacen pocos niños, ha dicho.
También se detecta que, a partir de los 60 años, la feminización de la población aumenta y se acentúa el desequilibrio a medida que avanza la edad, como se constata en que las mujeres representan el 56% de los riojanos de 65 años o más.
En esta evolución se aprecia la influencia de fenómenos migratorios, ya que el crecimiento de la población riojana de nacionalidad española muestra mayor estabilidad.
POBLACIÓN EXTRANJERA
En 2016, por segunda vez, el número de mujeres extranjeras superó al de hombres, con 409 mujeres más y en total había contabilizadas 16.806 mujeres extranjeras, frente a 16.397 hombres.
La población extranjera residente en La Rioja fue el año pasado de 33.203 habitantes, el 10,6 % del total, lo que supone un descenso del 2,1 % respecto a 2015.
El 48,4 % de ellos procede de algún país europeo; el 26 %, de África; el 17,6 %, de América; y el 7,9 %, de Asia; y el colectivo más numeroso es formado por rumanos, con 10.333 ciudadanos; seguidos de marroquíes, con 6.555; portugueses, con 1.954; y paquistaníes, con 1.879; mientras que, entre 2005 y 2015, 10.603 personas que residían en La Rioja han adquirido la nacionalidad española.






