La renta agraria sube un 9,6% en 2016, empujada por la producción vegetal
Efe / Logroño
La renta agraria de La Rioja, por octavo año consecutivo de aumento, subió un 9,6 por ciento en 2016, empujada, sobre todo, por la producción vegetal, que se incrementó en casi todos los cultivos; mientras que disminuyó el valor económico del sector ganadero en un 4,3 %, excepto en el porcino y el vacuno de leche.
El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Íñigo Nagore, ha presentado hoy, en una rueda informativa, la evolución de la renta agraria en La Rioja de 2016, que mantiene la tendencia alcista registrada en la serie histórica de los últimos ocho años.
Nagore ha incidido en que 2016 fue, en general, un buen año para el sector agrícola de La Rioja, donde los agricultores y ganaderos lograron una renta de 420 millones de euros, un 9,6 % más respecto a los datos calculados en el avance de 2015, fijados en 383 millones.
«Estos datos no solo confirman la estabilidad y el progreso del sector agrario en la región, sino que recoge el fruto del trabajo de nuestros profesionales del campo, en un año complicado meteorológicamente, más cálido y seco de lo normal», ha indicado.
Este informe, que elabora el Servicio de Estadística y Registros Agrarios de la Consejería, apunta el comportamiento positivo de la producción vegetal, con incrementos en todos los grupos de cultivos, excepto de los cultivos forrajeros y el olivar.
El consejero ha subrayado que los precios percibidos por los agricultores subieron en el sector de patatas, frutas, olivar y viñedo; se mantuvieron en hortalizas frescas y bajaron en cereales y leguminosas grano; mientras que, en el caso de los ganaderos, descendieron levemente las cotizaciones, menos en porcino y bovino, donde se mantuvieron.
Sector agrícola
El valor estimado de la producción vegetal riojana ha registrado una subida del 6,9 % y, en el desglose por subsectores, todos aumentaron su valor económico, menos el oleícola.
El consejero ha relatado que, a la gran cantidad de grano recogido en La Rioja no le correspondió una elevada calidad; aunque la producción de trigo fue un 9 % superior a la media de las últimas cinco campañas; y la de la cebada aumentó un 34 %.
La campaña cerealista de 2016 se cerró como la tercera en abundancia del último quinquenio para el trigo y la segunda para la cebada, ha precisado Nagore, quien ha añadido que la producción de cereales grano aumentó un 39,3 % y los precios en los cereales de invierno bajaron un 15 %.
La cosecha de uva aumentó el año pasado en un 6,1%, la vendimia se calificó como «excepcional» en cantidad y calidad; las previsiones de los precios percibidos por el vino y la uva son positivas, con una estimación al alza del 6 %, lo que ha contribuido a una evolución positiva del valor económico del sector vitivinícola en un 7,8 % con respecto a 2015.
Tras el récord de producción obtenido en la anterior campaña de aceituna de almazara, el informe señala una reducción del 29 % en la última cosecha de oliva.
También ha subido un 1,1 % el valor del sector frutícola al aumentar las producciones y los precios percibidos en un 8 %; mientras que la producción de frutos secos y la almendra tuvieron un descenso del 45,4 % y de un 4 % en sus precios.
El «baile» de temperaturas fuera de los valores normales ha dejado un año de altibajos para la horticultura de La Rioja, con periodos de abundancia y hundimiento de precios, y otros de escasez, ha subrayado el consejero.
Sin embargo, el sector presenta, en su conjunto, una subida del 14,7 % por un «ligero» aumento en las producciones y en las cotizaciones, destacando las campañas de tomate de industria, pimiento, coliflor, judía verde y guisante verde.
A ello ha sumado que el champiñón fresco y de industria mostraron una gran estabilidad, la producción de patata bajó un 5,6 %, la superficie de las plantas industriales aumentó un 13,1 % y, aunque el girasol cae en un 49 %, la producción en este grupo de cultivos se incrementó porque la remolacha azucarera creció un 6 %.
Sector ganadero
Nagore ha explicado que han bajado los censos ganaderos en todas las especies, excepto en el porcino de cebo y el de animales vacunos.
El valor a precio de productor del sector del vacuno de carne disminuyó un 3,5 %; el censo del bovino de cebo descendió un 6,4 % y el número de vacas de carne es similar al existente en 2015.
El censo de vacas de leche aumentó, igual que los rendimientos, con un incremento de la producción en torno al 18 %, y las entregas de leche crecieron casi un 20 %, al pasar de 16,3 a 19,6 millones de litros; mientras que los precios de la leche bajaron un 6,5 %.
El sector con saldo positivo ha sido el porcino, cuyo valor económico subió en un 14,2 %; mientras que el de carne de ave se vio perjudicado por el descenso del número de animales en un 5,5 % y de sus cotizaciones en un 13 %, el precio más bajo desde 2010; además de que se mantiene la crisis de rentabilidad en la cunicultura.






