La era Diego Martínez al frente del Calahorra dio comienzo ayer con la primera toma de contacto entre el técnico logroñés y su plantilla. Después, jugadores y cuerpo técnico comieron en La Planilla antes de que el preparador riojano fuera presentado oficialmente como técnico de un Calahorra que tiene trece jornadas por delante para defender la categoría que tanto tiempo le costó recuperar. Diego Martínez, ex de Arnedo, Náxara e Izarra, entre otros, se confiesa «sorpendido» de la dimensión del Calahorra, el club «más profesional» en el que ha trabajado.
Es la envidia de muchos entrenadores riojanos porque destacando en la Tercera riojana ha conseguido llegar a Segunda B.
Es un premio al trabajo aunque otros entrenadores también lo hubieran merecido. Me siento muy afortunado por poder entrenar en Segunda B, poder verme en otra categoría y ver qué puedo hacer. El Izarra me abrió las puertas y me permitió tener una experiencia en la que se ha fijado el Calahorra. Estoy muy ilusionado y sólo quiero agradecer la confianza depositado. Sé que en este mundo se tira a lo fácil, al nombre. Soy un defensor del trabajo y es lo que me ha llevado hasta aquí.
En Calahorra daban por hecho su llegada pero este verano. Todo se ha acelerado.
No lo sé, no sé si yo era el entrenador elegido para la próxima temporada. Yo no tenía esa certeza pero tras la destitución de Miguel Sola, me han demostrado que confían en mí y que querían que fuese yo el entrenador. De hecho, creo que no han hablado con nadie más.
Renunció al banquillo del Tudelano pero no al Calahorra. ¿Por qué?
Porque es un club que en los últimos años ha trabajado muy bien y que ha crecido exponencialmente. Es el club en el que me he encontrado la estructura más profesional, estoy sorprendido. Además soy riojano y me gusta defender a los equipos riojanos. Me gusta la plantilla, el ambiente de La Planilla. Le he dicho que sí al Calahorra. Priorizaba a mi familia, a mi hija salvo que surgiera la oportunidad del Calahorra.
Tengo la sensación de que es de los pocos técnicos que eligen donde entrenar.
No, no. Cuando no me convence algo al cien por cien, me echo a un lado. Prefiero eso a arrepentirme a los quince días. Sé que mucha gente no entendió que me fuera del Náxara o del Izarra. Soy consciente de lo que quería y he tenido la suerte de que llegara. Prefiero que no me ofrezcan algo a tener que rechazarlo. Rechazar un proyecto siempre es difícil.
Firma hasta junio de 2020 con el objetivo de alcanzar la permanencia. Si el Calahorra se mantiene, sigue un año más. Pero la sensación es que hay equipo para más.
Firmo hasta junio de 2020, es eso. En cuanto a si hay equipo para más, pues no sé. Se suelen confeccionar plantillas para estar en una posición y cuando no se consigue, se generan dudas. La plantilla me gusta, por calidad, talento, forma física. En la jornada 38 se verá donde merecemos estar. Lo bueno es que los jugadores tienen buena predisposición.
Lo que es el fútbol. Debuta en el Calahorra en Estella. Alfonso Caneda, máximo responsable del Izarra, ha sido el primero en felicitarle pero teme todo de lo que usted es capaz.
Alfonso siempre será una persona importante en mi carrera porque fue el primero que me dio la oportunidad. Tengo mucho cariño al Izarra pero somos rivales, cada uno defendemos nuestro intereseses. Tengo muchas ganas de volver a Merkatondoa pero es cierto que es un contexto complejo y especial.
No ha entrenado en seis meses pero ha visto mucho fútbol.
Sí, he visto mucho fútbol. Veía al Calahorra y veía al rival. Lo mismo con Izarra, UDL o Tudelano. Me fijaba más en los visitantes que en los locales. Prácticamente he visto a todos los rivales del grupo II. Bien en directo o a través de plataformas veía tres o cuarto partidos.
¿Tenía ganas de sentarse en un banquillo?
Sí, porque el entrenador de fútbol es lo más vocacional que hay. Es muy difícil ser entrenador, siempre eres el primer responsable, las aficiones suelen estar con los jugadores… Todo lo que he hecho ha sido prepararme para ser entrenador.
¿El Calahorra es el mejor banquillo al alcance de un técnico riojano? Sé que Sergio Rodríguez es logroñés…
Para mí sí, el que quería ocupar. Hay otros clubes riojanos que lo están haciendo muy bien y los respeto. Pero estoy donde quiero estar, donde me veía…
Primer contacto con la plantilla. ¿Qué se ha encontrado?
Un equipo predispuesto a trabajar, con sensaciones positivas y ganas de cambiar la dinámica. Esto hay que hacerlo bueno con resultados.
¿Cómo se cambian las dinámicas?
Desde el trabajo, no hay otra forma. Potenciar las virtudes de la plantilla, que las tiene y son muchas.
¿Cuáles?
Intensidad muy alta en el juego, calidad alta, nivel de integración importante…
Sola tenía fama de entrenador distante. Usted es cercano y accesible.
Siempre he dicho que soy persona antes que entrenador. Creo que eso es muy importante en la gestión de grupos. No voy a fallar nunca a un jugador. Sí creo que sea cercano y accesible, me gusta conocer a los futbolistas en todos los ámbitos. Estoy para ayudarles a crecer. No sé cómo era Miguel. Cuando he competido con él, siempre he tenido muy buena relación.
Nacho Martín, técnico del Tudelano, piensa que la permanencia este año va a estar más barata. ¿Lo cree así?
No, no. Creo que se va a encarecer. El año pasado se necesitaron 45 puntos y average. En las segundas vueltas se suman muchos puntos. Todos luchan por ‘play off’, copa, ‘play out’, descenso… No va a estar nada barata.
¿Cómo definiría el partido de Merkatondoa? ¿Final? ¿Punto de inflexión?
No es una final, queda mucho. Pienso que todos los partidos son igual de importantes. Esto es una cuestión de regularidad, no de finales ni de inflexiones.
You may also like
