Julio Aranzubía y Agustín Abadía han sido los únicos técnicos capaces de ascender a Segunda B en el nuevo formato de ‘play off’. Aranzubía dirigió al Varea en la 2008-09 y este año ha regresado a los banquillos para encabezar la renovación de un Haro que se ha clasificado brillantemente para la fase de ascenso. El domingo los jarreros reciben al Náxara, con el que empatan a todo por la tercera plaza.
Aranzubía asume que la clasificación en la Tercera riojana «está condicionada por los duelos directos y nosotros aún tenemos que visitar la semana que viene al Calahorra».
De momento, se da por satisfecho con la temporada realizada pero sabe que los próximos partidos (Náxara, Calahorra y Agoncillo) son envenenados. «Tenemos una plantilla corta, con muchos jugadores por encima de los 2.600 minutos. Por la afición, no podemos especular y saldremos a ganar, pero no sé si luchar por la tercera plaza compensa el riesgo de lesiones o fatiga de cara al ‘play off’. Me dan pánico estos tres partidos», se sincera. «A principios de año esperábamos entrar entre los cuatro primeros aunque el objetivo no está del todo cumplido porque tenemos la tercera plaza al alcance», acotaba.
En las últimas jornadas, Aranzubía no ha seguido mucho al Náxara «porque lo conozco muy bien y tienen mucho mérito todo lo que hacen» aunque «sí que es cierto que parece que por los resultados están más irregulares».
Tras casi diez cursos alejado de los banquillos, asume que se ha topado con un grupo XVI con nivel en el que la principal sorpresa ha sido que «Varea, Anguiano o Alfaro» no hayan seguido el ritmo de los de arriba. «Por problemas de licencias, es cierto que hay tres o cuatro equipos muy flojos, pero tácticamente el nivel ha subido mucho. La Tercera riojana no tiene el nivel de la andaluza, catalana o madrileña, pero no somos menos que Cantabria o Murcia. Unos tienen calidad, nosotros ritmo e intensidad», defendía.
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