Los tres heridos en la explosión de Nalda estaban manipulando gas para extraer aceite de marihuana
Los tres jóvenes que resultaron heridos en la explosión de una vivienda en Nalda que se produjo el pasado 10 de octubre estaban manipulando gas para extraer ‘aceite de marihuana’, según ha informado la Guardia Civil en una nota, en la que también señala que los tres chavalaes, de 16 y 17 años, han sido detenidos como presuntos autores de un delito de elaboración de sustancias estupefacientes.
Precisamente uno de los menores heridos en la explosión tuvo que ser evacuado al hospital de Zaragoza para ser tratado de las quemaduras que presentaba fruto de la explosión, que derribó muros y destrozó las ventanas del piso situado en un inmueble del centro de esta localidad riojana.
La deflagración se debió a una importante acumulación de gas en la cocina, donde los tres jóvenes heridos extraían y purgaban ‘aceite de marihuana’ por el método conocido como BHO (‘Butane Hash Oil’). La manipulación «imprudente» del gas empleado durante el proceso de extracción de esta sustancia estupefaciente generó una atmósfera explosiva en la cocina que derivó en una detonación y posterior deflagración por una fuente de calor, como la vitrocerámica, o por la chispa causada por alguno de los heridos al encender un mechero, ha explicado la Guardia Civil tras haber concluido la investigación.
Durante el registro de la vivienda se localizaron e intervinieron los útiles empleados para la extracción del aceite cannábico, como botes de cristal repletos de cogollos de marihuana, cinco recipientes de gas butano de los utilizados para recargar mecheros, extractos de resina, cazos y cazuelas.

A disposición de la Fiscalía de Menores
Este hallazgo ha servido para que agentes del equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) detuvieran y pusieran a disposición de la Fiscalía de Menores a los tres heridos en la explosión por su presunta autoría en un delito contra la salud pública por elaboración de sustancias estupefacientes.
Las actuaciones llevadas a cabo en el interior del inmueble las realizaron la Unidad Orgánica de Policía Judicial, el Equipo de Desactivación de Explosivos y el Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil.
La Benemérita ha advertido de la alta peligrosidad que supone para quien realiza este tipo de proceso casero, dado al alto poder de volatilidad de los inflamables empleados.






