Sentencia 14N: Pablo Alberdi, condenado a 4 años y 9 meses de cárcel; Merino a 1 año
Feli Agustín / Logroño
Con una profunda decepción y algún grito de indignación han recibido esta mañana el centenar de personas convocadas por STOP Represión la sentencia por los incidentes ocurridos en el Espolón, tras la manifestación de la huelga general del 14 de noviembre de 2012.
El último proceso que quedaba pendiente en España por los hechos acaecidos el 14N, visto el pasado mes de abril en el Penal 1, ha deparado penas de prisión para los dos sindicalistas de la CNT juzgados: Pablo Alberdi, para el que las acusaciones pedían cinco años y nueve meses, ha sido condenado a tres años y nueve meses por un delito de atentado a la autoridad y a un año por desórdenes públicos; mientras que la condena para Jorge Merino ha sido de un año -dos pedía la Fiscalía- por desórdenes públicos por inducción, ‘sin, según su abogada, haber estado’.
Según ha exlicado a la puertas de los juzgados la letrada Henar Moreno, Alberdi ha sido absuelto de un delito de lesiones a un policía, por el que le pedían un año, porque «se consiguió acreditar» que esa dolencia no fue causada por un golpe, sino que era preexistente. ‘En el juicio no se pudo probar la culpabilidad, como era la obligación de la Fiscalía y la Abogacía del Estado, y nosotros sí que conseguimos probar su inocencia’, destacó la letrada de Merino, quien denunció que ‘con probar la inocencia no basta, hay que acreditar también que esto es un montaje, pero siempre queda la estrategia de copiar y pegar [en el fallo] el escrito de acusación’..
Ambos sindicalistas, profundamente afectados, no han podido hacer declaraciones tras conocer la sentencia y, de hecho, Alberdi ha abandonado el lugar nada más salir del Palacio de Justicia; Merino, algo más tranquilo, ha agradecido las muestras de apoyo recibidas.
‘Esto no acaba aquí‘, avanzó Moreno, quien anunció que la sentencia, de 123 páginas, será recurrida con la confianza de que la Audiencia Provincial, cuya resolución espera en unos seis meses, ‘vea el caso con la objetividad suficiente para hacer lo único que, a nuestro entender, se pude hacer, que es absolver a uno y a otro» y es que, reiteró, tras este juicio «solo cabía la absolución’.
En el caso había también un tercer encausado, miembro de UGT, a quien Fiscalía pedía cuatro años de prisión por dos delitos de desórdenes públicos y atentado; pactó con el Ministerio Público reconocer uno de lesiones, por lo que la pena impuesta fue de seis meses, sustituibles por una multa de 720 euros, como así figura en la sentencia conocida esta mañana. A las puertas de los juzgados, se mostró también bastante afectado.
El derecho a un juicio justo
La letrada Henar Moreno entiende que esta sentencia lanza un mensaje y es que siempre conviene pactar. ‘Yo te ofrezco un acuerdo para que no haya ingreso en prisión [como sucedió a los tres acusados de este caso, uno de ellos aceptó] y si quiere probar tu inocencia, te juegas cinco años de prisión» reflexionó Henar Moreno, quien mostró su preocupación por ello, al entender que no solo se atenta contra el derecho a la libertad de expresión, a manifestarse, movilizarse y a luchar ‘por lo que creemos son nuestros derechos’, sino que atenta también contra un juicio justo . ‘El escrito de la acusación debe ser acorde con la realidad, creemos que fiscales y abogados del estado deben pedir las penas que se deben imponer, no pedir grandísimas penas para evitar el juicio’ porque, resaltó Moreno, un proceso justo es un derecho recogido en la Constitución.
Manifestación el día 8, sábado
La Plataforma Stop Represión ha convocado el sábado una manifestación en protesta por la condena a Alberdi y Merino. Considera que, con esta sentencia, «la ‘no-Justicia’», copia sin reparos el relato inicial de la Fiscalía. ‘Se siguen sin probar las acusaciones de la Fiscalía, se dan como hechos probados incongruencias y sucesos que durante el juicio quedaron, como mínimo, puestos en duda’; además de que ‘se desestiman las pruebas de la defensa’.
Por su parte, Podemos, Cambia Logroño, IU y Equo afirman, en una nota conjunta, que se trata de un juicio político, donde los diferentes movimientos sociales y sindicales, que mantenían la movilización en la calle contra los recortes que el Estado sufrió en aquellos años, ‘eran los señalados y a los que se buscaba acallar con actuaciones como la del 14N’.






