Los constructores critican la escasa ambición del Plan General
Feli Agustín / Logroño
Sin perjuicio de que acaba de dar el primer paso de un largo recorrido -posiblemente el Plan General Municipal (PGM) no estará ratificado antes de, como mínimo, tres años-, la actualización del avance del mismo, que fue el miércoles presentado por su redactor, el sociólogo y arquitecto José María Ezquiaga, ya ha despertado primeras impresiones.
En concreto, la Asociación de Empresarios de la Construcción, Promoción y Afines de La Rioja (CPAR) considera que, aunque «razonable», es un documento poco ambicioso, que «constriñe y encorseta» las posibilidades de desarrollo de ciertas actuaciones que, ahora mismo no son necesarias, pero pueden resultar atractivas dentro de unos años. «Es un documento muy inicial, muy a vista de pájaro, pero, desde esa perspectiva, creemos que es poco ambicioso y conservador», afirma el secretario general de la CPAR, Juan Ramón Liébana, que, entre otros aspectos, argumenta su opinión en la creencia de que «no apuesta por el futuro crecimiento de Logroño en población, en el sentido de que se parezca más a Zaragoza que a Soria». Entiende que no convierte a la capital en una ciudad atractiva «para que los jóvenes no se marchen o lleguen nuevas empresas y se instalen; en definitiva, no contribuye generar más ciudad».
Sin previsión
Líébana, que recuerda que es una acción de gobierno que llevan reclamando «muchos años», apunta que se ha elaborado con los índices de población en crecimiento cero, «sin previsión de futuro», una circunstancia que contempla como discutible para un plan que, como mínimo, debe tener vigencia, para dos décadas. «Tomar como referencia el movimiento poblacional de la crisis es poco ambicioso», reitera Liébana, que piensa que Logroño debe aspirar a crecimiento de ciudadanos, económico y social, algo que «no se ve reflejado en el documento».
Al respecto, el secretario de CPAR apunta que el PGM, como instrumento que permite rediseñar la ciudad, es una herramienta «óptima» para dibujar a Logroño como polo de atracción «de todo tipo» y razona que el planteamiento de «cerrar el cinturón de circunvalación y afirmar que no se va a crecer nada fuera de esa ronda sur es poco ambicioso».
Tecnología y rehabilitación
Juan Ramón Liébana lamenta que el Ayuntamiento «no se haya sentado» con la CPAR para escuchar su opinión sobre la reforma del PGM. «Parece razonable haberse reunido con el sector para planificar por donde se quiere que la ciudad se desarrolle, como poco, durante los próximos 20 años», argumenta.
El secretario de los constructores, sin perjuicio de defender instrumentos adecuados para «apostar por la rehabilitación profesionalizada», considera apropiado, dentro de la filosofía de retención de talento y atracción de inversiones, dotar a la ciudad de una zona -denomines parque digital o no- con infraestructuras tecnológicas punteras, de 4g o 5g.






