Logroño duplicó el superávit por habitante, hasta los 101,5 euros
Feli Agustín / Logroño
«En aras de la transparencia», la concejal de Hacienda, Mar San Martín, presentó ayer la Cuenta General del Ayuntamiento de Logroño, que recoge diferentes indicadores en la gestión de la economía municipal, como inmovilizado, inversiones gestionadas para otros entes públicos, patrimonio público del suelo, inversiones financieras, tesorería, información sobre el endeudamiento y la liquidación del presupuesto.
«Es un retrato fidedigno de la gestión llevada a cabo en 2017 en los aspectos económico, financiero, patrimonial y presupuestario», dijo la concejal, quien entiende que ese espejo refleja la «solvencia y salud financiera» del Ayuntamiento de la capital, además de la estabilidad presupuestaria.
San Martín, también responsable de Transparencia, asentó su afirmación en datos y, así, informó de que el superávit global alcanzó el año pasado los 15,3 millones de euros, frente a los 8 millones de 2016, lo que se traduce en el doble por habitante, al pasar de los 53 euros de hace dos ejercicios a los 101,5 del pasado, aunque, bien es verdad, que por una modificación en la contabilidad nacional en 2016 únicamente se tenían en cuenta 11 meses de gastos.
La concejal señaló que, del mismo modo, aumentó el gasto, que pasó de 868 a 900 euros por habitante; y la inversión, que ha crecido en casi 30 euros por vecino -de 74 a 105 euros.
A pesar de que la deuda general bajó al 44% de los ingresos corrientes liquidados, cada ciudadano de Logroño debía 311 euros, tres euros más que el ejercicio precedente, pues se tiene en cuenta los pagos pendientes a acreedores y proveedores. Por cierto que, el periodo de pago a proveedores está en 21,5 días frente a los 30 permitidos.
Sobre impuestos
La responsable de Hacienda destacó que la recaudación de impuestos, tasas y precios públicos alcanzó los 71,9 millones de euros, lo que supone 1,7 millones menos que en 2016, circunstancia que obedece a las bonificaciones en el IBI o a la decisión del Ayuntamiento de no girar el impuesto de plusvalías en caso de pérdidas hasta que se acometa la reforma de la financiación local.
Las cuentas anuales se preparan a partir de los registros contables del Ayuntamiento y se presentan de acuerdo a la Ley de Haciendas Locales, así como la Orden por la que se aprueba el modelo de contabilidad local.
Una vez elaborada la memoria, la Cuenta General es sometida a informe de la Comisión Especial de Cuentas del Ayuntamiento, que se celebra la próxima semana; debe aprobarse en el pleno municipal antes del uno de octubre para su remisión al Ministerio de Hacienda. La Cuenta, que es «farragosa y laboriosa», se colgará en la web municipal, al igual que la Memoria, más accesible para los ciudadanos.
De chicos y chicas
La responsable de Hacienda se detuvo en la composición del personal municipal, que tuvo de media a lo largo del año 896 personas en nómina, pero que cerró 2017 con 903 trabajadores, un 6,5% más que en 2016, de los que 841 eran funcionarios, 23 laborales -se trata de contratos para impartir cursos a desempleados-, y 39 concejales y personal de libre designación.
En conjunto, hay más hombres que mujeres, circunstancia que obedece a la escasa presencia femenina en tres áreas importantes: Parque de Servicios; Policía Local y Bomberos; en cambio, en puestos de oficina las mujeres son mayoría.
En el grupo de 19 personas eventuales, el peso femenino es abrumador, 17 chicas por solo dos varones.






