La reforma del IES Sagasta comenzará a mediados del 2018

Efe / Logroño

El presidente de La Rioja, José Ignacio Ceniceros, ha anunciado este lunes que su Gobierno afrontará en su totalidad la reforma del IES Sagasta de Logroño, con una inversión de 26 millones de euros, y cuyas obras se prevé que comiencen a mediados de 2018, con un plazo de ejecución de 30 meses.

Ceniceros ha presidido la presentación del proyecto de reforma del centro, en la que han participado también el consejero de Educación, Alberto Galiana; y el arquitecto que ha dirigido el diseño de la obra, Miguel Fernández Rueda. Al acto también han asistido la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra; la presidenta del Parlamento riojano, Ana Lourdes González, y la dirección del IES Sagasta, representada por su titular y su jefe de Estudios.

La previsión es que el expediente de la obra pueda licitarse en el último trimestre del presente año y los trabajos puedan iniciarse a mediados de 2018, ha precisado Ceniceros en una posterior conferencia de prensa.

El centro contará con una superficie útil total de 10.992,10 metros cuadrados y una superficie construida total de 14.583,70.

El proyecto

El proyecto racionalizará los espacios y mejorará la iluminación natural, la eficiencia energética del edificio y su adaptación a la normativa actual en materia de seguridad y accesibilidad, con el objetivo de adaptar el edificio a las necesidades educativas del siglo XXI y potenciar su vertiente cultural y social.

Así, se plantea mantener, como principal, la fachada norte, por la que se accederá al salón de actos, el aula magna o la biblioteca, y propone una segunda entrada en la fachada de Duquesa de la Victoria, que utilizarán principalmente los alumnos, ha informado el arquitecto. Esta distinción permitirá un horario de apertura y un control de accesos independientes para ambos espacios.

Dentro del edificio, en la planta baja se situarán 1º y 2º de ESO, mientras que 3º y 4º irán a la planta 1, y Bachillerato se alojará en la segunda planta. Esta última, nueva en la concepción original del edificio, reduce el fondo de la crujía para permitir la entrada de luz al corredor de distribución de la planta primera y permite ajustar su anchura a los espacios requeridos.

En esta crujía se genera una planta baja rasante destinada a vestuarios para los usos deportivo y cultural, almacenes y una importante área de instalaciones, ha detallado el arquitecto.

La adopción de este sistema compacto en la crujía sur liberará «un importante espacio en el interior del edificio y recuperará la estructura formal del resto de crujías, como grandes contenedores que en la planta primera se destinan a las aulas emblemáticas del instituto (laboratorio de física y química, laboratorio de ciencias naturales, aula de dibujo o talleres, aula magna y salón de actos)», ha informado.

En planta baja, estos grandes espacios se destinarán a usos deportivos y culturales, ha precisado.

Los dos patios interiores se cubrirán para minimizar el exceso de sol en el interior del edificio en determinadas épocas y horarios, y generar espacios de recreo que podrán utilizarse todo el año.

La escalera imperial se recuperará para dar servicio a los espacios emblemáticos, al tiempo que se creará una nueva junto al vestíbulo y acceso sur para minimizar los recorridos de los alumnos por el interior del edificio, ha explicado el arquitecto.

El programa docente dispone de diez aulas en la segunda planta, doce en la primera y ocho en la baja, ha añadido y ha explicado que la superficie útil total para espacios docentes será de 8.689 metros cuadrados.

Este espacio albergará dos aulas de informática, laboratorio de física, laboratorio de química, laboratorio de ciencias naturales, aula de plástica y de música, taller de tecnología, aula magna y salón de actos, así como espacios destinados al profesorado, la jefatura de estudios, dirección, conserjería, aseos o limpieza, entre otros.

El programa cultural contará con diversas salas que podrían ser utilizadas para exposiciones temporales o permanentes, con acceso y aseos independientes, y una superficie útil total de 1.312,3 metros cuadrados.

El programa deportivo dispondrá también de acceso, aseos y vestuarios independientes, y un gimnasio al que se le podrá incorporar uno de los patios cubiertos, con una superficie útil total de 990,8 metros cuadrados.

Fernández Rueda ha explicado que la porción de muralla localizada durante las catas arqueológicas se conservará y se valorizará dentro de la edificación proyectada.

El presidente, «orgulloso» con la reforma

El presidente ha asegurado que la reforma de este edificio centenario es una decisión que tuvo que adoptar como jefe del Ejecutivo en un momento en el que se debatía sobre el futuro de este inmueble, pero ha recalcado que está «orgulloso» de la decisión tomada porque «se ha cumplimentado un anhelo histórico» para la comunidad educativa y para la ciudad.

Ha subrayado que la inversión es «un gran esfuerzo presupuestario» para el Gobierno, pero ha destacado que «esta apuesta merece la pena» por la educación pública y por Logroño.

El presidente ha resaltado también que el IES Sagasta ha sido durante los últimos 128 años «el centro de la actividad académica y cultural de Logroño, y también de toda La Rioja» y ha resaltado que, afrontar su «reforma integral para devolverle la presencia y el protagonismo que merece, supone saldar una deuda con la memoria colectiva de nuestra ciudad y de sus gentes».

Ha incidido en que la ejecución de este proyecto es «una de las principales actuaciones de rehabilitación del patrimonio que va a ejecutar el Gobierno de La Rioja en su historia».

«No se trata de una rehabilitación ordinaria ya que hay elementos que hacen único a este edificio», ha subrayado Ceniceros, en alusión a que desde su construcción «ha sido sede del primer y durante muchos años único Instituto de Segunda Enseñanza de La Rioja».

Además, ha recordado que en sus aulas estudiaron personajes como el Doctor Zubía, Joaquín Elizalde, Josemaría Escrivá de Balaguer, Amós Salvador, Práxedes Mateo Sagasta, el Doctor Castroviejo, Julio Rey Pastor o Tomás Mingot.

Además, ha acogido el Ateneo Riojano, el Círculo Logroñés, la Biblioteca Pública, el IER, la Escuela de Arte, de Peritos, de Magisterio y de Comercio, entre otros, ha detallado.

Ceniceros también ha informado de que este proyecto impulsado por el Gobierno riojano garantiza en todo momento los usos educativos del edificio, ya que la infraestructura se adapta a las necesidades actuales de la enseñanza.

Conservación del patrimonio

Desde un punto de vista patrimonial, permitirá la conservación de «joyas que lo hacen único, como su biblioteca o su impresionante gabinete de historia natural, legado del que fuera profesor Ildefonso Zubía«, ha precisado. A este respecto, ha detallado que han sido debidamente catalogados por el IER y serán devueltos al edificio cuando finalicen las obras.

En concreto, el herbario del Doctor Zubía, que es una recopilación sistemática de la flora riojana, que comenzó a elaborarse en 1847 y que es único en España, «contará con un proyecto museográfico específico y una parte expositiva para disfrute de todos».

Lo mismo ocurrirá con la biblioteca, con sus más de 30.000 volúmenes, «consecuencia del poso que sobre sus anaqueles han dejado más de un siglo de presencia cultural y académica en Logroño y La Rioja, y que incluye ejemplares de los siglos XVI y XVII», ha resaltado el presidente.

También ha destacado que el proyecto supone también «un impulso a la revitalización del centro de Logroño» y, junto con las actuaciones que desarrollará el Ayuntamiento logroñés en la zona, «el Sagasta y la Glorieta se convertirán en un nexo de unión del Casco Antiguo con el resto de la ciudad».

Esta actuación, junto con otras como el Palacio de Justicia o el soterramiento, representan, según ha indicado, «una apuesta clara por valorizar el patrimonio urbano, ganando para la ciudad espacios y dotaciones públicas que mejoren la calidad de vida de los vecinos», ha informado Ceniceros.

También ha agradecido la positiva actitud y vinculación con la esencia y valores del Sagasta que mantienen sus 1.000 alumnos, 75 profesores y comunidad educativa durante este complejo proceso.