La reforma de Múgica ampliará aceras y eliminará barreras

Feli Agustín / Logroño

La Junta de Gobierno de Logroño va perfilando las actuaciones que anunció van a ser financiadas con la cuantía ahorrada del año pasado, y la alcaldesa, Cuca Gamarra, se ha reunido este viernes con comerciantes y vecinos para presentarles el anteproyecto de la segunda fase de remodelación de la calle Múgica, en el tramo comprendido entre las calles Pérez Galdós y Huesca. Esta intervención da continuidad a la acometida en 2013, entre Gran Vía y Pérez Galdós, y mantendrá los principios técnicos y estéticos de la primera fase.

Así, y entre otras actuaciones, se ensancharán las aceras y eliminarán barreras arquitectónicas con el objetivo, dijo Gamarra, de dar protagonismo al peatón, proporcionar mayor calidad de vida y «garantizando mejor ámbito urbano».

Con un presupuesto estimado de 671.000 euros y un plazo de ejecución de seis meses, se abre ahora un proceso participativo para que vecinos y comerciantes introduzcan propuestas al documento elaborado por el Ayuntamiento con la previsión de que el proyecto definitivo esté listo tras el verano, con la intención de que puedan licitarse las obras en el último trimestre del año y ser acometidas ya en 2019.

¿Qué se va a hacer?

Las principales actuaciones consisten en la eliminación de barreras arquitectónicas, ampliando las aceras hasta un ancho de 4,30 metros en la zona oeste y de 2,50 metros en la este; en la misma línea, se establece la creación de orejas en la intersección con la calle Somosierra, con lo que se mejora la seguridad vial y la accesibilidad.

También se contempla la redistribución del espacio ya que, además de la ampliación de las aceras, se establece una calzada de 5 metros de anchura con circulación en sentido único (sur-norte) y una banda de aparcamiento en línea en la margen este de 2,20 metros de ancho, cuando ahora se puede aparcar en ambos lados.

Además, la amplitud de la margen oeste permitirá la plantación de arbolado de alineación, aproximadamente 28 ejemplares. «Y como es una actuación integral, y no solo un lavado de cara», se sustituirá la red de abastecimiento, se instalará nuevo alumbrado público o se renovará el mobiliario urbano.

«Estamos muy ilusionadas, llevamos mucho tiempo esperando esta obra», han afirmado miembros de la Asociación de Vecinos Centro.

Desde 1930

Jerónimo Jiménez, en su libro Las Calles de Logroño y su historia, sitúa los orígenes de la calle Múgica en la década de los años 30 del sigo pasado, con la denominación Particular del Doctor Múgica por concentrar propiedades de este médico. En los años 40 empezó a crecer, como las de su entorno, enlazándose con Pérez Galdós en 1950, circunstancia que obedeció a la construcción de la sede de Los Boscos en un terreno donado por el doctor Múgica. La mayoría de los edificios existentes datan de los 60 y 70, aunque el más reciente de ellos fue proyectado en la década de los 90.