Al rico sarmiento
Bárbara Moreno / Logroño
Este jueves todo el Casco Antiguo de Logroño olía a rico sarmiento y a chuletilla asada. Como cada año en San Mateo, la Peña La Alegría organizaba en la Plaza del Mercado su Certamen de Chuleta al Sarmiento, y en esta ocasión en su 39 edición. Este año, un total de 58 cuadrillas se apuntaron al concurso para dar cuenta de su buen hacer con el asado de chuletillas.
El presidente de la peña Alegría, Luis Barrón, explicaba que es un acto ya muy tradicional en Logroño. Explicó que en total se asan en la plaza 425 kilos de chuletillas de cordero de pasto.
El acto en sí se compone de tres partes. Por un lado, es el concurso, con sus 58 cuadrillas (de 4 personas) que por 60 euros la peña les proporciona dos kilos de chuletillas, la parrilla, la gavilla de sarmientos, el vino y una mesa, además de la tierra en el suelo para asar. Y hay dos concursos, al que mejor ase las chuletillas de toda la parrilla, y se llevan cuatro chuletillas de plata, uno para cada componente. Y, también se premia la degustación de la chuletilla. Es decir, que el jurado examina por cuadrillas a la que más pelados y limpitos dejen los huesos, «y sin hacer trampas con utensilios o cuchillos», explicaba ayer, Diego Jalle, jurado del certamen.
Por otro lado, los peñistas de La Alegría también asan chuletillas, porque es la degustación del día de la Semana Gastronómica de la plaza, a razón, de una chuletilla, con pan, y vino por 2,80 euros. Y, los ciudadanos ya estaban haciendo fila en la plaza para adquirir su pincho desde las 10.00 de la mañana. A las 11 pasadas empezaron a repartirlas. Y es que este es uno de los pinchos más concurridos de los que se elaboran en la Semana Gastronómica, porque ‘no todo el mundo se puede asar unas chuletas en sarmiento todos los días en su casa’. Se pueden dar unas 2.000 raciones.
Y, por otro lado, los ciudadanos también podían adquirir una mesa dentro del recinto, para degustar una chuletada entera, unos dos kilos de carne, con su vino, pan ‘lo que necesiten’, apuntó Barrón, por unos 65 euros.
Chiringuitos de cuadrillas
Con todo, las cuadrillas participantes llegaron a la plaza a eso de las 10:30 horas para empezar a montar su chiringuito con sus utensilios, bebidas, y demás piscolabis. Unos llevaban varias ediciones participando,’más que por ganar, por hacer una buena chuletada en medio del centro de Logroño, y comerla con los amigos’. Otros llevaban varias generaciones participando (abuelos, hijos y ahora nietos). Y también había ganadores de otros años, para ver si repetían su hazaña.
¿Y el secreto? Poner las chuletas más gruesas en el medio de la parrilla, y hacerlas un poquitín de más sin pasarse, sin perder el ojo. Y lo mejor,’degustarlas’.
Además,durante el concurso actuó la Rondalla Logroñesa y también se celebró un concurso de jotas. ¿Hay algo más riojano?






