¿Están los riojanos más concienciados con la velocidad?

Bárbara Moreno / Logroño

Parecía que la medida de la Dirección General de Tráfico (DGT) de reducir la velocidad máxima permitida a 90 kilómetros por hora en las carreteras aumentaría las multas por exceso de velocidad, y sin embargo se ha conseguido todo lo contrario, al menos en sus primeros seis meses de vigencia en La Rioja. Y así lo considera la jefa de Tráfico de La Rioja, Beatriz Zúñiga, que con datos de las carreteras N-232, N-111, N-124, N-120, las autonómicas en las que más se iban a apreciar las sanciones, estas han bajado en un 16%. Es decir, según los datos de tráfico, desde que entró en vigor esta normativa, el 29 de enero de 2019 y hasta el 8 de agosto de este mismo año, se han contabilizado 1.030 multas por superar los 90 kilómetros por hora en estas carreteras autonómicas riojanas, y en el mismo periodo de tiempo de 2018, se contabilizaron 1.227 multas por exceder los 100 kilómetros por hora. (Se refieren tanto a las interpuestas por radares móviles como fijos).

La jefa de Tráfico explica que se ha hecho el mismo número de campañas de velocidad y no se ha aumentado ni disminuido la vigilancia por esta línea con respecto al año pasado, y, si el número de multas se ha reducido, «se puede deber a que ha habido más concienciación por parte de los conductores riojanos, o no, también se ha podido deber al miedo a la sanción». A ella, y a todo su equipo, le gustaría que el motivo de la reducción de sanciones haya sido esa mayor concienciación de los conductores, «ojalá sea por lo primero, por la concienciación», reitera. Y, en cualquier caso, explica que se ha reducido el número de accidentes por exceso de velocidad en La Rioja, «por lo que la medida parece que está dando su resultado», al menos en los primeros meses de su puesta en marcha.

La medida, en realidad diseñada para reducir la elevada siniestralidad, afecta a unos 1.700 kilómetros de carreteras convencionales de La Rioja, la mayoría de ellos en la red autonómica y sólo 250 kilómetros en la estatal, que son los que más tráfico registran. Y la mayoría de ellos se encuentran en la N-232.

El principal objetivo de la medida es reducir la siniestralidad vial y cumplir el objetivo de la Estrategia de Seguridad Vial 2011-2020 de bajar de 37 la tasa de fallecidos en accidente de tráfico por millón de habitantes. En contraposición, en 2017 la tasa fue de 39.

El límite cambió de 100 a 90 km/h y se vieron afectados 10.000 kilómetros de carreteras. Y, exceder la velocidad entre 91 y 100 km/h, conllevaba una multa de 100 euros, la misma que exceder la velocidad entre 101 y 120 km/h: 100 euros.

Las multas

• Exceder la velocidad entre 91 y 100 km/h conlleva una multa de 100 euros.
• Exceder la velocidad entre 101 y 120 km/h conlleva una multa de 100 euros.
• Exceder la velocidad entre 121 y 130 km/h conlleva una multa de 300 euros y dos puntos.
• Exceder la velocidad entre 131 y 140 km/h conlleva una multa de 300 euros y dos puntos.
• Exceder la velocidad entre 141 y 150 km/h conlleva una multa de 500 euros y 6 puntos.
• Exceder la velocidad a partir de 160 km/h conlleva una multa de 600 euros y 6 puntos.