El gusto de ganar por 1-0
Los seguidores del Arsenal, en los noventa, entonaban al ritmo de los Village People un cántico que se hizo habitual entre los aficionados ingleses: One nil to the Arsenal, dado la tendencia a que los gunners, con Graham Greene en el banquillo, concluyeran así sus partidos.
El 1-0 se ha convertido en la seña de identidad de la Segunda B en general y, en particular, del grupo II, dada las estrecheces con las que históricamente se mueven los inquilinos del grupo norte.
La UDL, en las últimas jornadas, se está acostumbrado a un marcador feliz para sus intereses. Hasta en cuatro ocasiones el equipo de Sergio Rodríguez se ha impuesto con este resultado. La racha empezó con un cabezazo de Bobadilla ante el Tudelano. Continuó en el Nuevo Malecón con un penalti de Andy y prosiguió en Requexón con el solitario tanto de Ñoño. El cuarto y último, por ahora, 1-0 llegó el pasado sábado, ante el Vitoria, con Bobadilla de nuevo como protagonista. Los 1-0 suelen ser sinónimos de fútbol soporífero aunque el triunfo ante el Vitoria fue de todo menos aburrido.
Pese a que la UDL -la mejor defensa del grupo- le ha cogido gusto a este resultado, el rey del 1-0 en el grupo II es el Barakaldo, segundo clasificado que hasta en cinco ocasiones (Arenas, Izarra, Durango, Vitoria y Langreo) se ha impuesto por este mismo marcador.
El Racing, el equipo más realizador de la categoría, ha festejado tres 1-0 (ante Real B, Barakaldo y Gimnástica), por dos del Mirandés (Lanreo y Gernika) mientras que el Leioa sólo ha firmado un 1-0 (con el Mirandés).
A la espera de que el conjunto blanquirrojo despliegue su potencial realizador, el 1-0 coloca a la UDLen una buena plataforma para conseguir su tercer ‘play off’.






