El edificio de Correos ya tiene licencia para ser un hotel de 5 estrellas
El edificio de Correos sale de su parálisis y comienza la verdadera cuenta atrás para convertirse en un hotel de cinco estrellas. El grupo Hotusa, un año después de que se hiciera con el inmueble, está a punto de superar uno de los trámites más importantes que garantizan la viabilidad de su proyecto de rehabilitación: lograr la licencia conjunta de obra y actividad. Una autorización que la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, despejó el miércoles tras firmar la Resolución de Alcaldía admitiendo así la solicitud de la cadena hotelera. No obstante, es necesario que antes se publique en el Boletín Oficial de La Rioja (BOR) y superar el preceptivo plazo de exposición pública (20 días hábiles). Paralelamente, el proyecto será estudiado por las diferentes unidades técnicas municipales.
En una nota, la alcaldesa de Logroño ha destacado que «siempre dijimos que velaríamos por que la actuación fuera respetuosa con este inmueble con alta protección patrimonial; siendo imprescindible el mantenimiento de la volumetría, la edificabilidad y la tipología«.
Se trata -como ha señalado Gamarra- «de un proyecto muy ilusionante, largamente esperado por la ciudad. Un nuevo servicio de atracción turística, situado en un lugar emblemático y estratégico; que va a contribuir a dinamizar la economía local pero sobre todo va a actuar como locomotora de regeneración para el Casco Antiguo».
El edifico que albergará el nuevo hotel fue construido en 1932 bajo la firma del arquitecto Agapito del Valle. Se levanta en una parcela de 620 metros cuadrados y ocupa un total de 2.358,72 metros cuadrados distribuidos en semisótano, baja, primera y segunda planta.
Un hotel exclusivo en el corazón del Casco Antiguo
Este es el punto de partida para el proyecto que ahora se desarrollará y mediante el que el grupo Hotusa pondrá en marcha un establecimiento tipo boutique, con una categoría prevista de cinco estrellas, con 41 habitaciones distribuidas en cuatro plantas, con un área de spa con piscina, restaurante y terraza.
La que era oficina central de Correos en nuestra ciudad cerró al público en 2004 para la ejecución de unas obras de reforma pero nunca más volvió a a abrir. Tras problemas de diversa índole, la situación se paralizó hasta el convenio urbanístico que la alcaldesa de Logroño y el presidente de Correos firmaron en 2014 y que posibilitó su desbloqueo y la enajenación del inmueble.






