Convocadas las ayudas para mejorar la accesibilidad de las calles de los municipios riojanos
El Gobierno de La Rioja ha abierto la convocatoria para este año de las ayudas dirigidas a avanzar hacia la accesibilidad universal en las calles de los municipios de la comunidad autónoma. Así lo ha anunciado este martes el consejero de Fomento y Política Territorial, Carlos Cuevas, que ha informado de los detalles de esta iniciativa junto a la directora general de Política Local, Raquel Sáenz.
El plazo para solicitar las ayudas finalizará el próximo 10 de diciembre y las obras deberán ejecutarse durante el año que viene. Cada actuación podrá recibir un máximo de 15.000 euros para cubrir hasta el 80% de la inversión prevista.
Estas subvenciones se destinarán a financiar las obras necesarias para mejorar la accesibilidad, de acuerdo a la normativa vigente, en infraestructuras urbanísticas, lo que incluye aceras, zonas de aparcamiento, parques, plazas, paseos o jardines, entre otros.
En concreto, las líneas que pueden acogerse son para urbanizaciones de calles (ensanchamiento y rebaje de aceras, transformación en calle de plataforma única, construcción de vados, pasarelas peatonales o rampas, instalación de barandillas o pasamanos y cerramiento de alcorques) o la reserva de plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida.
También para instalar mobiliario urbano adaptado para personas con alguna discapacidad (bancos, fuentes, marquesinas y semáforos sonoros) o colocar señalización especial para personas con discapacidad intelectual o con dificultades de comprensión.
Esta línea de ayudas forma parte del Fondo de Cooperación Local en apoyo a las inversiones de todos los municipios y entidades locales de la comunidad autónoma con el objetivo de contribuir al bienestar y la calidad de vida de los riojanos. Este programa cuenta con un presupuesto total de 16,6 millones de euros en 2018
Cuevas ha subrayado el interés de esta línea da ayudas, ya que ofrece facilidades a los vecinos y ayuntamientos, contribuye a mejorar la calidad de vida en el medio rural y, de esta manera, permite luchar contra la despoblación.






