La UDL visita este sábado Getxo (Fadura, 18 horas) en busca de una victoria que le permita descontar una semana más hacia el título. Aunque el encuentro se presenta muy desigual, los riojanos son el mejor visitante de la categoría y el Arenas, su rival, son el peor local del grupo II, Sergio Rodríguez no se fía de esos datos. El estado de Fadura condicionará el desarrollo del encuentro y igualará las fuerzas de locales y visitantes.
«El Arenas era un equipo creado para el juego asociativo, para llevar el peso del partido y, pese a ser un equipo del norte, no basan su fútbol en el juego vertical y tienen en casi todos los partidos más posesión que el rival», analizaba el técnico logroñés.
Sin embargo el mal estado del césped de Fadura a lo largo de toda la temporada ha penalizado su propuesta: «Tenemos que ver cómo está. Hace tres o cuatro semanas, el campo estaba muy mal pero en las últimas semanas ha mejorado», informaba antes de recordar que «Fadura les ha perjudicado».
El mal estado del terreno getxotarra ha damnificado al conjunto vizcaíno pero puede ser una baza del Arenas ante el líder «porque las fuerzas se igualan cuanto peor está el campo». Eso sí, para aclimitarse a la lluvia, el viento y el irregular piso de Fadura, la UDL cuenta con la «versatilidad» de su plantilla. Una virtud ejercitada a lo largo de todo el año pasado y de la presente temporada: «La versatilidad es muy importante y sobre todo en este grupo. En Segunda B la versatilidad puede ser la característica más importante», reconocía el preparador blanquirrojo.
Con 36 puntos por repartirse, la UDL aventaja en diez al Athletic B, circunstancia importante en lo «anímico» pero que no servirá para relajarse. «Si perdemos contra el antepenúltimo, las sensaciones serán malas. Lo afrontamos como un partido más. No vamos a mirar la clasificación. No nos fijamos en el colchón porque si lo hacemos va a empezar a reducirse», aclaraba.
El objetivo es repetir la imagen sólida y eficaz que ofreció la UDL en Tudela para descontar una jornada más camino de un título que, desde fuera, parece cantado.
Aunque las comparaciones con equipos como Atlético Baleares o Ibiza puedan ser recurrentes, a Sergio Rodríguez no le preocupa lo que suceda en el resto de grupos: «Queda mucha tela por cortar. Para nosotros y para el resto. Nos centramos en lo nuestro aunque evidentemente nos gusta el fútbol y vemos otros grupos», se despedía.
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