Los milagros, a veces suceden. Aunque el Promete necesita un par de ellos para salvarse -ganar los tres partidos que faltan, empezando este sábado por la tarde en Gernika, y que el Zamarat lo pierda todo- las riojanas llegan con vida a Vizcaya.
Lo hacen porque el Estudiantes, que había perdido los 23 partidos disputados hasta la fecha, sumó su primer triunfo en Liga Femenina ante un Zamarat que esperaba festejar en Madrid la permanencia y se vio sorprendido por el colista (75-64).
La victoria, inopinada, del Estudiantes da un atisbo de esperanza a las de Julián Martínez Alman que, en cualquier caso, tienen muy comprometida la permanencia. De momento tienen que ganar al Gernika, sexto clasificado, para llegar con vida a la penúltima jornada.
Los siguientes milagros ya llegarán.
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