Andreu apuesta por revolucionar la educación en La Rioja
Bárbara Moreno / Logroño
El curso escolar ha comenzado este lunes en Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional con 22.333 alumnos, y, junto a los de Primaria e Infantil que empezaron el pasado viernes, ya han iniciado el curso los 50.400 alumnos de todos los niveles, un 0,41% más que el año anterior. Y, aprovechando este arranque, la presidenta del Gobierno de La Rioja, Concha Andreu, acompañada del consejero de educación, Luis Cacho, han dado comienzo oficial al curso con una visita al colegio San Francisco de Logroño. Ambos apostaron por la calidad y la igualdad en la Educación, sin segregaciones ni guetos. Así la presidenta, apostó por «revolucionar la educación en La Rioja», que «hará a la sociedad más firme, y más fuerte, para asegurarnos el futuro».
Así lo ha asegurado Andreu refiriéndose a «una revolución en positivo», y en especial basada en la calidad y la igualdad, y con la educación pública «por encima de todo, sostenible, equitativa y solidaria». La presidenta ha reconocido que para desarrollar la educación de calidad que plantean se necesitan más recursos económicos, «porque los recursos humanos los tenemos y lo que tenemos que hacer ahora es protegerlos». Si bien, ha asegurado que se han comprometido en aumentar esos recursos económicos en educación.
Por otro lado, Andreu se ha referido a que los alumnos no se deberían preocupar solo de las calificaciones, sino también de otras áreas como el deporte o trabajar en comunidad.
Contra la segregación
En la misma sintonía se ha mostrado el consejero Cacho, y, tras ponderar las bonanzas con las que hoy cuenta la educación en La Rioja como la gratuidad de libros de texto o de escolarización en Infantil o las buenas calificaciones, ha lamentado que un informe de Save the Children indicara que La Rioja es la tercera Comunidad (tras Madrid y Cataluña) con más segregación socio-económico de sus alumnos y que habría que reubicar a un 27% del alumnado para que la estructura socio-económica en las aulas representara a la de la sociedad real. Así, el consejero ha abogado «por ser realistas», y ha dicho que apostará por metas más altas y exigentes, por afrontar objetivos estratégicos y ha pedido la colaboración de la comunidad educativa para «garantizar el equilibrio en su composición socio-económica, de género, de origen y de etnia». Así y en concreto ha asegurado que va a modificar las políticas de Educación y modificar criterios de zonificación, admisión y matrículas, para encontrar nuevos equilibrios basados en criterios morales y éticos para tener una educación sin segregación, ni guetos, con igualdad de género, y sin importar el origen o etnia del alumno. «La persona va a ser el centro de nuestra atención y del modelo que queremos rediseñar», ha sentenciado el consejero.
El San Francisco como modelo
El colegio San Francisco de Logroño ha sido este año el elegido para celebrar la apertura oficial del curso escolar por parte del Gobierno de La Rioja. Es un colegio con unos 120 alumnos de 10 nacionalidades diferentes, la mayoría del pueblo gitano, y árabe (en su mayoría pakistaníes y marroquíes). Así lo ha asegurado este lunes la que será a partir de este año la nueva directora, María Antonia Martínez. Y según ha indicado el consejero de Educación, Luis Cacho, este había sido el colegio elegido para que se viera «una impresión directa». Martínez felicitó y agradeció al Gobierno por haber elegido este centro donde trabajan «una metodología inclusiva en interculturalidad, para que nuestros niños y niñas sean capaces de dar una valores a la sociedad que sea igualitaria, equitativa, solidaria y sostenible». Agradeció también al Gobierno que apuesten por la escuela pública. Por su parte, la directora saliente, Begoña Andrés, quiso hacer una mención especial a todos los docentes jubilados, y aseguró que «tenemos la oportunidad de hacer un gran cambio en la educación hacia la igualdad», y apostó porque los alumnos desarrollen su propio talento.






