Agricultores y ganaderos piden una marca de proximidad de productos riojanos
Bárbara Moreno / Logroño
‘Mejor cuanto más próximo’ es el proyecto liderado por la organización agraria Arag-Asaja, en el que participan los grupos de acción local ADRA, CEIP Rural, Rioja Suroriental, y la IGP Pimiento Riojano y la Asociación Riojana de Ovino y Caprino (Arevi), que quiere y pide a la administración riojana impulsar la creación en La Rioja de una marca de proximidad que identifique a los productos riojanos y a los productores. De hecho, en otras comunidades ya existe una marca de estas características.
Estos impulsores también quieren que se ahonde en una regulación de este tipo de venta en La Rioja que bien podría hacerse directamente en la explotación, en mercados de productores, tiendas de venta directa, grupos de consumo, o plataformas on line o las ventas a la restauración.
Así lo ha explicado este lunes el secretario general de Arag-Asaja, Igor Fonseca, en una rueda de prensa, en la que también han participado la representante de los grupos de acción local, Ester Rubio; y el presidente de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Pimiento Riojano, Jesús Martínez.
«Se persigue que los agricultores y ganaderos aprovechen las nuevas tendencias del consumo para conseguir enfoques más rentables, que favorezcan otras opciones de negocios para los agricultores y ganaderos y luchar contra la economía sumergida», ha indicado Fonseca.
La venta de proximidad es aquella venta de productos sin intermediarios, del productor al consumidor. Una tendencia que va a más, y que, según ha indicado Fonseca en la Unión Europea, el 15% de los agricultores y ganaderos venden el 50% de su producto en venta directa. En España ese porcentaje es más bajo. Para La Rioja no hay datos, y aunque existe este tipo de venta, también denominada de kilómetro cero, es muy pequeña, «y falta mucho por desarrollar». Pero, precisamente eso es lo que quieren hacer con este proyecto, que se desarrollará al año que viene: elaborar un inventario, identificar a aquellas operadoras que ya lo hacen, hacer un diagnóstico. Y solicitar al Gobierno de La Rioja que regule esta venta directa.
Se trata de un proyecto que tiene un coste de 39.854 euros, de los que el Gobierno riojano va a subvencionar el 80%. Si bien, como ha dicho Fonseca, aún no se ha aprobado el convenio al que concurrieron en 2019, y está pendiente de resolverse por el cambio de organigrama.
Ester Rubio ha ponderado el apoyo del emprendimiento y de la actividad económica en el mundo rural como modo para sostener la población.
Economía sumergida.
Jesús Martínez por su parte ha querido denunciar las consecuencias que sufren los ganaderos y agricultores «que traen sus productos de no se sabe donde y los venden». «Nosotros tenemos toda clase de controles y queremos que todo esté controlado. «Tenemos problemas en los pueblos, lo único que queremos es que nos dejen trabajar», por eso entienden que crear una normativa y una marca también es la solución de esta lucha contra la economía sumergida.






