Acepta tres y años y medio de prisión por intento de asesinato
Efe / Logroño
El fiscal y el acusado de un delito de asesinato en grado de tentativa han pactado una condena para este hombre de tres años y medio de prisión, tres menos de los que inicialmente pedía el ministerio público. El juicio contra este hombre se celebró el lunes en la Audiencia Provincial, donde ratificó su conformidad con el acuerdo entre las partes. Para llegar a esta conformidad el fiscal aplicó la atenuante de reparación parcial del daño por el acusado, que está en prisión provisional, informó el Tribunal Superior de Justicia de La Rioja.
El acusado aceptó, por un delito de asesinato en grado de tentativa, tres años y medio de prisión, prohibición de acercarse a la víctima a menos de 100 metros durante 8 años y 3 años de libertad vigilada una vez terminada la condena.
Deberá indemnizar a la víctima con 5.000 euros por los daños y perjuicios morales causados, además de otra cantidad, por las lesiones sufridas y al Servicio Riojano de Salud por la atención sanitaria prestada, aunque las cuantías se fijarán en la ejecución de sentencia.
El fiscal pedía una pena de 6 años y 6 meses de prisión para un joven de 34 años, acusado de ser el presunto autor de un delito de asesinato en grado de tentativa a un empleado del Centro Remar, situado en el barrio de Yagüe de Logroño, a quien agredió con un objeto de cocina en noviembre de 2017.
Según relató el fiscal en su escrito de acusación, los hechos sucedieron el 23 de noviembre de 2017, en la cocina del centro Remar -dedicado a ayudar a personas marginadas socialmente- donde el acusado discutió por asuntos domésticos con el responsable de organizar la limpieza de este centro.
El procesado, «muy enfadado» porque el empleado le llamase la atención y con el ánimo de acabar con su vida, cogió un cuchillo, tenedor metálico o instrumento similar no concretado, pero con borde ligeramente agudo.
Con este objeto, y aprovechando que la víctima estaba de espaldas, el acusado le acometió de forma sorpresiva y le propinó un único golpe con una gran fuerza, que le fracturó ambas articulaciones de la mandíbula. Seguidamente, el acusado abandonó el lugar y dejó a la víctima sangrando abundantemente. A consecuencia de los hechos, la víctima sufrió una herida inciso contusa en una de las citadas articulaciones, que para su sanidad han requerido tratamiento médico quirúrgico, pendiente de curación.






