El penúltimo reto del Sporting
NR / LOGROÑO
El Sporting La Rioja inició el domingo en Ibiza su cuarta fase de ascenso a División de Honor y lo hizo con un sabor agridulce porque fue derrotado por 24-23, un mal resultado a tenor del desarrollo del encuentro aunque las riojanas se clasificarán para la segunda ronda siempre que ganen por dos a las pitiusas.
Para que el equipo de Luismi Ascorbe esté el lunes entre los cuatro aspirantes al ascenso, el apoyo del público de Lobete (este sábado, 20 horas) es fundamental.
Así lo entiende Luismi Ascorbe que confía en que el balonmano riojano se vuelque con un Sporting que está a un triunfo de disputar “su tercera fase final por el ascenso”. Mayo a mayo, el conjunto logroñés va ganando en “experiencia” y en “competitividad”, asume un Luismi Ascorbe que cree que en la mente de las jugadores no está presente el recuerdo del pasado año cuando se perdió en Lobete el ascenso en la fase final: “No va a afectar. El equipo ha cambiado aunque esas fases finales nos han servido para ir cogiendo experiencia”.
Ascorbe, pese a jugar en casa, no quiere hablar de favoritismos porque el Puig d’en Valls fue capaz, en el cuarto de hora final, de remontar a un Sporting que firmó una gran primera mitad pero que vio como las baleares, segundas clasificadas del grupo C, acababan de darle la vuelta al partido.
El preparador de las logroñesas confía en la capacidad de sus jugadores para dar la vuelta a una eliminatoria de incierto pronóstico.






