Coulibaly, el hombre gol para la permanencia

NR / LOGROÑO

Mohamed Coulibaly (Bake, 1988) se ha convertido en el refuerzo de última hora de la UDLpara tratar de asegurar la permanencia. El atacante senegalés cubrirá la ficha dejada libre por Titi, que próximamente será operado de su grave lesión, lo que ha permitido a la entidad fichar fuera de plazo.

Coulibaly tiene ocho jornadas por delante para demostrar su olfato goleador aunque será difícil que Sergio Rodríguez lo incluya ya en la convocatoria ante el Sanse («ya veremos si está», despejado su nuevo técnico).

El delantero vivirá en Logroño su segunda experiencia en Segunda B después de que en las dos últimas temporadas haya militado en el Racing, club que le retiró la ficha en el mercado de invierno recién concluido.

De hecho, este año su participación en el equipo racinguista no ha sido destacada, con sólo un gol en 19 jornadas (doce de ellas como suplente) pero sí lo fue en la 2015-16, en la que firmó ocho goles en 36 encuentros con el equipo santanderino.

Antes de recalar en El Sardinero, Coulibaly tuvo tiempo para conocer tres ligas. Empezando por las categorías amateures de Francia, de la mano del Guegnon (2008-09) y Saint-Louis.
A continuación puso rumbo a Suiza, jugando en el Dornach y en el Grasshoppers suizo, lo que le sirvió de trampolín para aterrizar en la liga inglesa. Primero jugó en el Bournemouth, protagonista esta temporada y la anterior de la Premier, después en el Coventry (otro clásico inglés)y después en el Port Vale, segundo equipo de la ciudad Stoke-on-Trent.

El rendimiento que pueda dar Coulibaly es una incógnita ya que sólo tiene ocho jornadas por delante para demostrar su valía.

Sergio Rodríguez, antes de dirigirle por primera vez, asumía que el senegalés es un «chico comprometido», requisito indispensable dadas las apreturas clasificatorias del club.
«Es un jugador con potencia, que al espacio es capaz de encontrar fácil la oportunidad», agregaba, «y tiene buen disparo».

La polivalencia es una de sus características ya que puede barrer todo el frente de ataque: «No sé si le voy a utilizar de extremo o delantero. Lo tengo que ver».
Si no puede ser ante el Sanse, por lo precipitado de su inclusión, tendrá que ser ante el Navalcarnero. Sin gol será más difícil salvarse.