La Rioja alcanza los 18 fallecidos y 654 contagiados

El Ministerio de Sanidad ha confirmado este domingo 18 personas fallecidas por COVID-19 en La Rioja y 654 personas contagiadas, de las que 17 están ingresadas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y 18 personas curadas (con alta hospitalaria) por el COVID-19,

La cifra de fallecimientos supone un incremento de tres más que el sábado y 90 nuevos contagiados que ayer, según han informado este domingo en una conferencia de prensa, por streaming, el portavoz del Gobierno, Chus del Río; y el director general de Salud Pública, Enrique Ramalle.

Las tres nuevas personas fallecidas son tres hombres de edad avanzada y con patologías previas, ha precisado Ramalle, quien ha recalcado que los 18 fallecimientos registrados hasta la actualidad se han producido en el Hospital San Pedro de Logroño.

A fecha de este domingo, hay 134 personas hospitalizadas, de las que 17 están en la Unidad de Cuidados Intensivos; se han producido 18 altas hospitalarias; 67 profesionales sanitarios están infectados por el COVID-19; y el 79,5 % de todos los casos positivos están en aislamiento domiciliario.

Hasta la actualidad, han dado negativo a los test de diagnóstico (PCR) 1.358 casos, de los que 110 correspondieron a la jornada de ayer, cuando, además, entró en funcionamiento la nueva unidad móvil de diagnóstico en el aparcamiento del CIBIR, de Logroño, para realizar estas pruebas a población de Logroño y zona centro de La Rioja, que practicó 39 test, aunque se estima que puede alcanzar entre las 80 y 100 diarias.

El director general ha anunciado también que este lunes, entrará en funcionamiento otra nueva unidad móvil de PCR, que se desplazará a los municipios donde se detecte una mayor incidencia del COVID-19 para realizar este tipo de pruebas, siempre, ha insistido, a criterio previo del facultativo médico como se ha hecho hasta la actualidad.

Respecto a las residencias de la tercera edad, el portavoz del Gobierno ha informado de que ayer, sábado, se presentaron las instrucciones para blindar los centros sociosanitarios con pernoctación, donde, hasta este domingo, hay 21 casos confirmados de COVID-19.

La Residencia Los Jazmines de Haro es la que mayor incidencia al COVID-19 registra, hasta la actualidad, en cuanto a este tipo de centros, y hay entre 10 y 12 con un único caso confirmado o dos como máximo, ha precisado Del Río.

Sobre el comportamiento de la curva de incidencia del COVID-19 en La Rioja, Ramalle ha aclarado registra una «alta incidencia» en España porque es una comunidad que tiene «una gran capacidad de realizar pruebas diagnósticas» -una media de 200 diarias- a diferencia de otras comunidades y, por ello, «hay muchos casos» que han dado positivo.

En este contexto, Ramalle ha recalcado que la incidencia poblacional del COVID-19 «no es el mejor indicador» porque depende del número de pruebas diagnósticas que se realicen, lo que varía entre una y otra comunidad.

«Quizá, lo que será un indicador más indicativo, -ha dicho- son las tasas de hospitalización» y, en este sentido, La Rioja tiene una tasa de 42,7 casos por 100.000 habitantes; País Vasco, donde también ha habido «una incidencia importante», tiene una tasa de 45,4 y Madrid de 127, ha informado.

Además, la tasa de los ingresos en la UCI por el COVID-19 es de 5,4 en La Rioja, 3,7 en el País Vasco y 12,6 en Madrid, ha incidido Ramalle, quien ha valorado más estos indicadores a la hora de hacer un análisis del comportamiento de la curva que el indicador poblacional que, ha insistido, depende del número de pruebas.

Desde el inicio de la pandemia, se han realizado 1.358 pruebas a personas sospechosas de haber contraído la enfermedad que han dado negativo, y ha habido el doble de casos negativos que positivos. Ayer, por ejemplo, hubo 90 casos positivos y 110 negativos en estos test, ha precisado Ramalle.

Además, los datos de este domingo «no son tan malos como los de ayer», sábado, porque, aunque se hayan detectado más positivos, la gravedad «no es peor», en lo referente a hospitalización y fallecimientos.

Ramalle ha informado de que es preciso esperar al próximo 28 de marzo, cuando finalizan los 14 días desde la entrada en vigor de las medidas de aislamiento y, será entonces, una vez finalizado el período de incubación del virus, el momento para revaluar los datos y tener una visión concreta del comportamiento de la onda epidémica.

El director general y el portavoz del Gobierno han incido en la necesidad de que la sociedad cumpla las medidas de higiene y aislamiento de la población porque el virus no flota en el aire, sino que se transmite por las manos.

En la actualidad el Hospital San Pedro está preparado para atender específicamente los ingresos por el COVID-19 porque «todavía tiene una capacidad de expansión de entre un 30 y 40 por ciento», aunque ya se han preparado centros de convalecencia una vez dadas las altas hospitalarias, ha dicho Ramalle.

El portavoz del Gobierno ha subrayado el comportamiento de la sociedad riojana que «está dando lo mejor de sí para afrontar esta situación inédita» .

Respecto al material de protección, ha convenido con Ramalle en la necesaria distribución racional del mismo, con criterios de prioridad y ha apelado al «uso racional».

También ha dicho que en los próximos días las comunidades autónomas dispondrán del material necesario, dentro de la compra centralizada realizada por el Ministerio de Sanidad, aunque también ha valorado «el trabajo especial» que se hace desde la industria de Arnedo para que «no falte».