La ciudad deportiva de la UDL prevé un hotel de 90 habitaciones

Félix Revuelta, propietario de la Unión Deportiva Logroñés (UDL), cuenta con todos los parabienes del equipo de Gobierno municipal para llevar adelante su ciudad deportiva en Valdegastea, aunque se retrasará varios años.

«Es un proyecto ilusionante, de gran componente social y deportivo, y que generará una importante inversión para Logroño», considera el concejal de Deportes, Rubén Antoñanzas, quien ha señalado este miércoles que así se lo han hecho saber a sus promotores. Ahora bien, según el informe redactado por los Servicios Técnicos y Jurídicos municipales, que han estudiado el anteproyecto presentado la semana pasada por Revuelta, su concreción resulta en estos momentos inviable, lastrada por condicionantes urbanísticos que el Ayuntamiento está dispuesto a despejar.

Jaime Caballero, concejal de Desarrollo Urbano, ha señalado que en la parcela de casi 130.000 metros cuadrados que ha adquirido la UDL por algo más de 1,2 millones de euros, prevé construir dos campos de fútbol de hierba artificial, otro de hierba natural con un graderío para 3.000 personas, y cuatro de fútbol siete. Además, en el anteproyecto figuran dos edificios para residencias de jugadores, un hotel de 90 habitaciones y un club social con varias piscinas y un club de pádel.

Caballero, que ha mostrado «toda su voluntad política» para que la actuación se inicie en este mandato, ha informado de que el análisis efectuado señala que es imposible realizar esta obra en suelo rústico, clasificación que tiene la parcela, lo que hace inviable cumplir los plazos anunciados por Revuelta la semana pasada, que avanzó su intención de trasladarse a la ciudad deportiva de Valdegastea el próximo verano.

«Entendemos que la propuesta se debe reorientar para ajustarse a los límites técnicos legales», ha señalado Caballero, respuesta que no ha sorprendido a la UDL.

La tramitación

Así, las cosas, los terrenos han de pasar por una tramitación urbanística «muy compleja», que requiere incluso el concurso del Gobierno de La Rioja como integrante de la COTUR, la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo, pasos que el responsable municipal de urbanismo detalló.

Así, primero habrá que delimitar un sector de suelo urbanizable para rematar los barrios de Valdegastea y Yagüe; después hay que ordenar la zona a través de un plan parcial; y, por último, ejecutar la urbanización para que disponga de todos los servicios.

Esta complicada tramitación dilatará el proyecto varios años; de hecho, según Caballero, las primeras actuaciones, la construcción de los campos, no podrán llevarse a cabo antes de dos. Además, necesitan el permiso del Gobierno, pues el Ayuntamiento «tiene prohibido» dar abastecimiento y saneamiento a un terreno rural.

El concejal, que ha insistido en su interés impulsar este proyecto, por lo que «acelerará todos los trámites técnicos y legales», ha subrayado su buena disposición en el hecho de que el Ayuntamiento no tenía previsto delimitar los terrenos, actuación que se realizará al margen de la revisión del Plan General.

Una vez ordenado el suelo, y aunque el anteproyecto no lo contempla, incluirá aprovechamiento residencial, lo que permitiría levantar viviendas; el promotor deberá también facilitar el acceso, que se concretaría a través de una ronda oeste desde la zona de avenida de Burgos.