Vuelve la liga del Logroño
Entre el parón con motivo de los compromisos internacionales de las selecciones y las curvas propiciadas por un calendario que ha enfrentado al Balonmano Logroño con dos de los rivales más duros de la Asobal (Ademar y Barça), el conjunto de Miguel Ángel Velasco lleva casi un mes sin conseguir una victoria.
La última llegó el 11 de octubre en el Palacio ante el Sinfín (30-24), por lo que toca volver a sumar de dos en dos. La oportunidad llegará este viernes por la noche en tierras benidoremses (Palau d’Esports l´Illa de Benidorm, 20 horas, con arbitraje de Miguel Martín Soria y David Monjo) en el que los riojanos se enfrentan a un Benidorm firmemente asentado en la zona media de la tabla (8 puntos, dos menos que los que totalizan los riojanos) y que acostumbra a dar, de vez en cuando, algún que otro susto al Logroño.
Conscientes de que rivales directos por el subcampeonato como Bidasoa o Cuenca, que este sábado recibe al Sinfín, no aflojan la soga, el conjunto logroñés deberá ofrecer su perfil más solidario para hacer frente a un Benidorm que este año no se está mostrando excesivamente contundente en casa.
De hecho, hasta la fecha los alicantinos han sumado como locales dos victorias y las dos han llegado con mucho sufrimiento: 31-30 ante el Puente Genil y 25-24 con Guadalajara en su último partido en casa. Equipos como Valladolid o Bidasoa ya saben lo que es ganar en L’Illa.
El duelo en Benidorm será el primero que los de Miguel Ángel Velasco disputen sin el italiano Gabriel Ceretta, lesionado de gravedad el pasado sábado ante el Barça. Los riojanos pierden a un lateral contundente con lo que la rotación logroñesa se verá justo ahora que llegan semanas de dobles enfrentamientos para el Logroño.
Derbi inédito entre Ademar y Nava
Además del Benidorm-Logroño, la novena jornada ofrece este viernes otros dos duelos. A las 19 horas tendrá lugar en León un derbi castellano inédito entre un Ademar en racha y los segovianos del Nava. A las 20.30 horas se disputa el Huesca-Valladolid, dos equipos en horas bajas que luchan por la permanencia.






