Fomento formaliza el contrato de obras para la ronda sur entre Arrúbal y Navarrete
El Ministerio de Fomento ha formalizado el contrato de obras de la ronda sur de Logroño, en el tramo entre Arrúbal y Navarrete, por un presupuesto 111,8 millones de euros.
La actuación consiste, fundamentalmente, en la utilización de la autopista AP-68 entre Arrúbal y Navarrete como circunvalación de Logroño una vez libre de peaje, como alternativa al eje N-232-LO-20, con una amplia remodelación en cuanto a la implantación de nuevos enlaces y remodelación de los existentes, según ha detallado el Ministerio de Fomento. El objetivo de esa actuación es mejorar su conexión con las redes del Estado y la autonómica, constituyéndose asimismo en la futura variante sur de Logroño.
La actuación se encuentra recogida en el protocolo de colaboración firmado en mayo entre los gobiernos central y riojano para mejorar la funcionalidad y movilidad del corredor formado por la autopista AP-68 y la carretera N-232.
En los próximos días se procederá a levantar el acta de comprobación de replanteo de las obras e iniciar las obras de este nuevo tramo de autovía, que tendrá 29 kilómetros de longitud y que aprovecha, en su mayor parte, el trazado actual de la AP-68, al discurrir por los términos municipales de Murillo de Río Leza, Agoncillo, Arrúbal, Logroño, Villamediana de Iregua, Lardero, Navarrete y Fuenmayor.
El tramo de nueva A-68 se contempla libre de peaje, por lo que el proyecto contempla la construcción de dos nuevas áreas de peaje troncales y la remodelación de ocho enlaces.
En la conexión 1, que tiene su origen en la N-232 y a partir del que de definen los ejes que la enlazan con el tronco de la AP-68, se incluyen los enlaces de Arrúbal, Agoncillo, donde solo se plantea la eliminación del área de peaje actual, así como la remodelación de la intersección existente en el enlace con la N-232; Recajo; y con la LR-250, que permitirá la conexión con el Hospital San Pedro de Logroño, el polígono industrial de La Portalada y la zona este de la capital riojana.
También se incluye el enlace de acceso a Logroño y Lardero/N-111, que modifica el trazo actual de esta carretera en su cruce con la AP-68 para situar el nuevo enlace de acceso a la capital y al municipio larderano desde la nueva A-68.
A partir de la conexión 2, a la altura del kilómetro 123 de la AP-68, el trazado abandona las calzadas de la autopista para discurrir en nuevo trazado; y en el enlace A-12/variante de Fuenmayor, que coincide con la actual conexión entre la autovía A-12 y la LO-20, se plantea el enlace final del tramo al conectar la N232 en el inicio de la futura variante de Fuenmayor.
Además, en el tronco de la autovía, en toda la longitud del proyecto, se revisan y adecúan todos los elementos de señalización, balizamiento y sistemas de contención existentes, y los despejes necesarios en curvas, a efectos de garantizar la visibilidad. Dadas las características del firme actual de la AP-68 y el notable incremento de tráfico esperado, se proyecta un refuerzo del mismo en todo el tramo.
Se prevén 30 estructuras, de las que 12 serán pasos superiores, 15 pasos inferiores; 3 muros de contención y 1 de escollera; la reposición de 48 caminos agrícolas y del Camino de Santiago afectado por las obras en el último enlace, para lo que se diseñará un paso superior y dos pasos inferiores.






