GYLDA y Marea Arcoíris se unen en el Orgullo LGTBI+ 2019

Efe / Logroño

Las asociaciones riojanas GYLDA y Marea Arcoíris se unen para celebrar conjuntamente la manifestación del Orgullo LGTBI+ 2019 en Logroño, que partirá de la Plaza del Mercado el sábado, con el lema ‘Orgullo y resistencia. Ni un paso atrás’ y a la que no han invitado ni al PP ni a Ciudadanos.

El secretario de GYLDA, Jesús Cárcamo, y el portavoz de Marea Arcoíris, Álvaro Villar, destacaron, en una rueda informativa, que, a pesar de la diversidad que existe dentro del colectivo, les une el objetivo de común de seguir reivindicando los derechos LGTBI+ y celebrar los que ya se han conseguido.

«Invitamos a toda la sociedad civil de Logroño a acudir a la manifestación, pero, debido a la ambigüedad del PP y Cs en los pactos con la extrema derecha a nivel nacional, no podemos invitarles formalmente como partido», precisó Cárcamo.

Recordó que en 2019 se cumple el quincuagésimo aniversario de los disturbios en Nueva York del bar Stonewall, momento en el que comenzó la reivindicación de derechos LGTBI+, y señaló que, en la misma época, en España ya se luchaba contra «la represión, la tortura y la muerte» de miembros de este colectivo.

A los actos celebrados desde el pasado 17 de junio por Marea Arcoíris, se suman las actividades organizadas por GYLDA, como ‘Conversaciones intergeneracionales’, conducido por Bárbara ‘reina de la pantoloneta’, en el que personas del colectivo contarán su experiencia durante la dictadura española, en un acto previsto para mañana.

Además, este mismo día, se entregará el Premio GYLDA y actuarán ‘Las Varietés Riojanas’, añadió Cárcamo, quien agregó, respecto al auge de la «lgtbifobia» y la extrema derecha en España, que, en la medida en la que hay una mayor visibilidad del colectivo LGTBI+, aumentan las agresiones por parte de «esa minoría».

Por su parte, Villar reivindicó el avance de la ley de igualdad LGTBi+ en La Rioja, que aseguró que se «quedó en el limbo» en la anterior legislatura; y se refirió a la necesidad de que haya una ley trans integral de ámbito nacional.

Se refirió a la incidencia que tienen en el ámbito educativo los «discursos de odio» que se producen en centros escolares contra el colectivo LGTBI+, así como a su dificultad para encontrar trabajo y la precariedad laboral que sufren.