Riesgo, esfuerzo, aventura y compromiso con la tierra como ejes de su fortaleza y éxito. Las centenarias paredes del Café Moderno dieron cobijo ayer a más de 2.200 años de historia empresarial riojana en el primer acto del Club de Empresas Centenarias de La Rioja, una ceremonia, presidida por el jefe del Ejecutivo regional, José Ignacio Ceniceros, que sirvió para dar la bienvenida al nuevo miembro, el establecimiento hostelero que dirige Mariano Moracia en la plaza Martínez Zaporta, y para homenajear a sus otros 18 compañeros. Todos ellos recibieron una hermosa y pesada placa.
Fernando Ochoa, presidente del Club, nacido a finales del pasado año bajo el auspicio de la FER y por iniciativa de Diario LA RIOJA, Bodegas Martínez Lacuesta, Bodegas Carlos Serres, Mediavilla Cerrajeros, Gráficas Ochoa y Santos Ochoa, destacó la heterogeneidad de los asociados, un grupo «al que une el deseo de fomentar y poner en valor la cultura de empresa a largo plazo, la visión empresarial». «Hay 23.000 empresas en La Rioja, con lo que solo el uno por mil cumplimos los requisitos de tener la sede social en esta tierra y haber cumplido o superado el siglo. Es la satisfacción de un sueño cumplido».
Ceniceros, por su parte, trasladó el «respeto y reconocimiento de la sociedad riojana». «Vuestras empresas son un motivo de satisfacción para vosotros, pero también de gratitud para los riojanos porque habéis contribuido al fortalecimiento de nuestra economía», destacó el presidente, quien recordó que «necesitamos más emprendedores y empresarios, tenemos que estimular a los jóvenes y para ellos vuestras empresas deben ser el espejo en el que se deben mirar, porque lleváis 100 años de trabajo, de incertidumbres, de hacer cuentas y de pasar y superar crisis porque aquí seguís, subiendo la persiana cada mañana».
