Un clásico anticipado
A partir de este sábado Minis de Arluy y Haris se vuelven a ver las caras. Logroñesas y tinerfeñas reeditan un clásico que, en esta ocasión, llega de forma anticipada porque ni riojanas ni canarias esperaban volver a verse las caras tan pronto.
Porque el Minis cumplió con su cometido y, como marca la tradición, se proclamó campeón de la liga regular. El Haris, mudado ahora a la vecina La Laguna, también hizo los deberes, clasificándose en la penúltima jornada para la lucha por el título. Pero lo que no entraba en los planes de las laguneras ni de las logroñesas es que el Haris pasara como cuarto, lo que adelanta a las semifinales la final anticipada.
Tras la desaparición del Iruña, el Haris se ha erigido en la principal némesis deportiva de la entidad que preside Carlos Arratia.
La hegemonía del Voley Logroño es indicustible aunque el Haris ha tenido la oportunidad de reivindicarse, privando a las riojanas de dos títulos que parecían pertenecerle por derecho. Así, en 2016, el Haris se hizo con la Supercopa, derrotando al Naturhouse en partido único por un claro 3-1. Meses más tarde, en la Copa de la Reina, el Haris sorprendía a las de André Collin, imponiéndose por 3-2 (el último set cayó del lado tinerfeño por 15-13).
El resto de enfrentamientos cayeron del lado riojano. Las tres últimas finales de la Superliga han enfrentado a Minis y Haris. En 2018, el Minis se impuso por la vía rápida, en tres partidos (3-1, 3-0 y 3-1). En 2017, se ganó en tres tardes aunque hubo un poco más de competitividad (3-0, 3-1 y 3-2), marcadores que se repitieron en 2016 (3-0, 3-2 y 3-1). En la Copa, hace unos meses, el Minis se impuso por un claro 3-0 en Las Palmas mientras que el Voley Logroño se hizo con la Supercopa de 2018 (3-1) y la de 2017 (resuelta a dos partidos, los dos dominados por el Naturhouse).
El sábado (Lobete, 18 horas) nuevo capítulo de una rivalidad que no cesa.






