«El cambio que queremos en La Rioja no es un recambio del PP por el PSOE, sino liderar nosotros los gobiernos»
Gustavo Basurto / Logroño
Cambio, regeneración, apertura a la sociedad…Pablo Baena, la apuesta de Ciudadanos de La Rioja para intentar alcanzar la Presidencia del Gobierno regional el próximo 26 de mayo, defiende, casi como un mantra, que su partido es una alternativa ajena al bipartidismo PP-PSOE y con opciones claras de liderar gobiernos y ayuntamientos.
¿Qué significa el ‘cambio sensato’ que promete en La Rioja?
La Rioja está parada. El índice de actividad industrial ha caído en torno a un seis por ciento, mientras en el conjunto de la nación ha subido un 0,8; en diez años se han marchado 20.000 jóvenes por no encontrar oportunidades en su tierra; hace un tiempo el Gobierno aspiraba a estar entre las 60 regiones más europeas más prósperas y estamos en la posición 112. Todos los indicadores nos dicen que La Rioja está parada. Esto es fruto de un proyecto agotado del partido que lleva más de 20 años en el Gobierno y es el momento de relanzar un proyecto que solo puede venir de un cambio en las instituciones y que el conjunto de la sociedad civil se ponga de acuerdo sobre qué queremos hacer para poner a La Rioja a la vanguardia de España.
Usted es candidato sin necesidad de primarias, al no presentarse más aspirantes. Tampoco habrá primarias para las listas al Congreso y las municipales. ¿Cuándo se anunciarán los nombres?
Estamos en el proceso de hablar de nombres para completar las listas. Tenemos personas muy solventes y capacitadas y otras próximas a nosotros, de la sociedad riojana, con las que hemos tenido encuentros y que estarían dispuestas a participar en nuestro proyecto. Las propuestas de listas irán al comité autonómico y de ahí al comité ejecutivo nacional, que da el visto bueno final. Los cabezas de lista a las generales se conocerán previsiblemente el día 9.
¿Y el resto de integrantes de su candidatura autonómica?
Estamos montando el puzle. La lista estará conformada para un proyecto ganador. También tenemos en nuestro entorno personas muy capacitadas y estamos pensando no solo en las listas electorales, sino también en los retos que deberemos asumir, porque queremos ganar las elecciones en La Rioja. El escenario de mayorías absolutas ha concluido. Cuando entremos en los gobiernos, contaremos con personas solventes procedentes de nuestro partido y también de la sociedad civil riojana, porque no somos un partido endogámico como el PP o el PSOE.
¿Habrá sorpresas en La Rioja, con fichajes de políticos procedentes de otros partidos, al estilo de lo ocurrido en Castilla y León y Baleares?
Estamos abiertos al talento, venga de donde venga. En nuestra mentalidad de abrir el partido y las instituciones al conjunto de la sociedad civil, en La Rioja cabe la posibilidad de incorporar independientes.
La fragmentación del voto hace pronosticar que Ciudadanos resultará determinante para formar Gobierno. Rivera dice que no pactará con Sánchez, pero parece que el partido no descartaría acuerdos con el PSOE en regiones ahora gobernadas por el PP, como La Rioja.
Cuando hablamos de llevar a cabo un cambio para nuestra comunidad autónoma, no estamos hablando de un recambio, de cambiar al PP por el PSOE, sino de superar el bipartidismo. Y la mejor manera es conseguir los suficientes votos para liderar nosotros los gobiernos. Estamos en un escenario en el que parece que no habrá mayorías absolutas y tendremos que entendernos con otras fuerzas. El Partido Socialista de Pedro Sánchez, el que pacta con los nacionalistas y los independentistas, y limpia la cara a Otegui, es un proyecto que no beneficia a España. En el PSOE de La Rioja hay personas moderadas, con las que se puede hablar, y si en el ánimo del Partido Socialista riojano está abandonar la carrera loca del sanchismo de pactar con los que quieren romper España, podremos sentarnos a hablar; de la misma manera con el PP, si es el caso, siempre y cuando esté dispuesto a mirar al centro y no a los extremos y haga un esfuerzo de regeneración.
¿Ve indicios de esa regeneración?
Por lo que se ve no tienen intención de hacerlo. La reciente visita de Pablo Casado para proponer al candidato al Gobierno de La Rioja es un claro ejemplo. ¿No tienen en su estructura personas que puedan llevar a cabo esta regeneración?
A expensas de lo que digan las urnas, ¿con qué partido se sentiría más cómodo a la hora de pactar?
Aspiramos es a ganar las elecciones para conseguir liderar este gobierno. Esperaremos a ver los resultados.
¿Y si fuera preciso contar con Vox?
Queremos conseguir suficiente fuerza en el Parlamento y en los municipios para que los extremos no tengan capacidad de decisión.
Ante un hipotético acuerdo de Gobierno en La Rioja, ¿exigirían tener responsabilidades de Gobierno, ocupar consejerías o incluso otros cargos, como el Parlamento regional o el Ayuntamiento de la capital?
La única manera real de hacer cambios es ejerciendo el gobierno. El escenario ha cambiado muchísimo en cuatro años. Nuestro partido ha avanzado a una velocidad importante, estamos preparados y en una nueva fase en la que entraremos a gobernar, porque pensamos que la manera de llevar a cabo el cambio que queremos es desde el gobierno. Desde la oposición se pueden hacer muchas cosas, y hemos conseguido desde bajadas de impuestos a medidas sociales como la gratuidad de la educación de cero a tres años, y creo que la sociedad riojana ha percibido la necesidad de un proyecto como el de Ciudadanos.
Su apoyo al Gobierno del PP en la presente legislatura exigió que Pedro Sanz no siguiese como presidente. ¿Podrían plantear de nuevo cambio de personas?
Claro que podría darse el caso, porque el Partido Popular tiene que hacer un esfuerzo enorme de renovación y regeneración, y eso no es solo cambiar caras, sino también las formas de hacer políticas. Pero nuestro marco mental es otro; es el de conseguir suficiente fuerza para liderar los gobiernos.
Las encuestas, que empujaban con fuerza a su partido meses atrás, parecen haber perdido fuelle.
Las encuestas son encuestas y depende de cuáles sean les damos mayor o menor veracidad. El ejemplo es el CIS de Tezanos, que parece el cocinero mayor del reino. Pero todas las encuestas indican desde hace mucho tiempo una tendencia ascendente y continuada de Ciudadanos, y cada vez que abrimos las urnas hay más votos naranja, como se vio en Andalucía y en Cataluña. Estamos convencidos de que esa misma tendencia la materializaremos también en La Rioja.
¿Qué les dicen sus datos internos referidos a La Rioja?
Que Ciudadanos crece con mucha fuerza y que es posible alcanzar el objetivo de liderar el Gobierno de la Comunidad autónoma.
No aprobaron los presupuestos de la Comunidad, pero han sacado adelante en el Parlamento un conjunto de medidas urgentes con el PP. ¿Es un indicativo de que la relación no es mala de cara a posibles pactos postelectorales?
Es un indicativo de que Ciudadanos actúa con responsabilidad y de que pensábamos que estas medidas había que ponerlas en marcha, porque era necesario asegurar la gratuidad de la educación de cero a tres años y ayudar a los autónomos. También se ha hablado de que el PP lleve a la Comisión Mixta Congreso-Senado una auditoría integral de la Comunidad autónoma, para saber cómo se ha gastado, si hay chiringuitos…Pero una cuestión es una ley de medidas urgentes, que se ha negociado apretando al PP, y otra lo que pueda suceder después de las elecciones.
¿La crisis por la marcha de la diputada Rebeca Grajea está cerrada?
La realidad es que Rebeca ya no está en el partido y yo no voy a hablar de una persona que ya no está con nosotros.
Le pido un ejercicio de síntesis. ¿Qué 5 primeras medidas adoptaría si fuera presidente de La Rioja?
La primera, sin duda, una auditoría integral e independiente de todo el sector público de La Rioja, porque necesitamos saber cómo se ha gastado, si hay o ha habido chiringuitos o dedazos, cómo se ha gestionado el dinero público…Otra cuestión es solicitar una reunión con el presidente del Gobierno de España, que espero que sea Albert Rivera, para hablar del ferrocarril y de la necesidad de integrar de forma clara a La Rioja en el corredor Cantábrico-Mediterráneo. También urge proyectar ya los enlaces de la autopista AP-68 para que cuando quede liberada de las prórrogas que hicieron el PP y el PSOE en el año 2026 pueda vertebrar al conjunto de la Comunidad. Es necesario además pensar que La Rioja no es solo Logroño y tenemos que tener un proyecto de comunidad que integre a todos los municipios, especialmente las cabeceras de comarca, que durante tanto tiempo han sido olvidadas. Y creo muy necesario hacer un plan para atraer inversión e industria de forma activa.
¿Cómo se consigue ese objetivo de atracción de inversiones?
La ADER tiene que contribuir al desarrollo económico y es necesario generar un grupo dentro de la Administración que se dedique a buscar inversión para completar los más de dos millones de metros cuadrados de suelo industrial que tenemos vacíos. Los números dicen que un riojano cobra de media 5.400 euros menos que un vasco, y estamos al otro lado del Ebro; probablemente eso tenga mucho que ver con que el Gobierno riojano no ha hecho durante 24 años nada por atraer industria e inversión, aunque también tiene que ver con el injustificado cuponazo vasco. Hay que tratar sobre el famoso artículo 46 del Estatuto de Autonomía. No puede ser que el PP y el PSOE solo se acuerden de él cuando llegan las elecciones y el resto del tiempo se lo pasen en conchabeo con los nacionalistas. El cupo vasco que firmaron el año pasado PP y PSOE con el PNV era un regalo equivalente a todo el presupuesto de La Rioja para un año. Esto genera unas desigualdades que no pueden darse y hay que tomarlo en serio.
Parece complicado acabar con el cupo vasco. ¿Qué medidas son factibles para evitar esa desigualdad?
Habrá que conseguir que el cálculo del cupo se haga de manera transparente y rigurosa, no a base de un regalo a los nacionalistas a cambio de su apoyo a otras cuestiones en el Congreso. No puede ser que el cálculo inicial del cupo fuera de unos 800 millones de euros y por arte de birlibirloque el PP, el PSOE y el PNV se metan en un cuarto oscuro y al día siguiente salgan casi 1.500. Habrá que pedir que haya una compensación del Estado por esa desigualdad entre ciudadanos a un lado y otro del Ebro. No puede ser que el gasto en educación o en materia sanitaria sea muy superior en el País Vasco. Y esto pasa porque el Gobierno de La Rioja se ponga firme.
Usted cita entre sus prioridades la búsqueda de inversiones, pero todas las comunidades están en lo mismo. ¿Qué fortalezas puede exhibir La Rioja?
Estamos en una situación geográfica privilegiada y además vivir en La Rioja es menos costoso que en otras regiones con una calidad de vida mayor. Pero necesitamos mejorar nuestras infraestructuras, no solo carreteras y ferrocarril, sino también las tecnológicas, porque hay polígonos industriales que no tienen la conexión a internet que hoy demandan las empresas.
¿En materia de turismo se le puede sacar más rentabilidad a la región?
Necesitamos un plan concreto para el desarrollo turístico del conjunto de la región. Tener una idea clara sobre a quién dirigirnos y del tipo de turismo que queremos atraer, cuáles son los cauces para conseguir y los entes que tienen que interactuar para ese objetivo. Es urgente sentar en una mesa a todas las partes implicadas en el sector turístico y decidir un plan de actuación con objetivos concretos, medibles, con hitos en el tiempo. Aquí cabría hablar también del aeropuerto.
¿Qué plantean para el aeropuerto?
Hay que hacer un plan de dinamización y tiene que estar ligado a la actividad turística también. Debe formarse una mesa de técnicos capacitados, que ofrezca un objetivo, un plan de acción y un cronograma. Pero en la política riojana hay poco afán de realizar las cosas de manera ordenada y con objetivos, quizá porque hay mucho político y poca gente que haya vivido el día a día de sacar un negocio adelante o trabajar con objetivos que cumplir. Nosotros ofrecemos una óptica más parecida al día de un ciudadano que al de la política tradicional.






