Como en los mejores años de la UDL de Pouso, el equipo de Sergio Rodríguez ha encontrado en la defensa una solución para casi todos sus males. El equipo logroñés no sólo se ha consolidado como la mejor defensa del grupo II (con 7 tantos encajados, sólo el Linense, con 6, ha recibido menos mientras que Ponferradina, Hércules y San Fernando han recibido el mismo número de goles en contra) sino que su defensa ha sido directamente protagonista en un tercio de los doce goles celebrados por la UDL.
Este protagonismo recae casi en exclusiva en el canterano Pablo Bobadilla, que en el año de su consagración en el primer equipo está disfrutando de continuidad (fijo desde la jornada 6) y, encima, de acierto rematador.
El espigado central, que también puede actuar como lateral en banda izquierda,ha anotado tres tantos en lo que llevamos de temporada, los mismos que han realizado Marcos André y Ñoño, las principales referencias ofensivas de la UDL.
Su estreno llegó en el triunfo en solitario ante el Tudelano. Después marcó en Leioa, pero los blanquirrojos no fueron capaces de rescatar ningún punto (2-1). El tercero, el segundo de cabeza, llegó en el tiempo añadido ante el Vitoria.
Antes de que Bobadilla se convirtiera en el pichichi inesperado de la UDL, otra zaguero, en este caso Santamaría, festejó el primer gol blanquirrojo del curso 2018-19. Fue en Las Gaunas, ante el Barakaldo, y sirvió para rescatar un punto.
Las cuatro dianas de los zagueros blanquirrojos han valido siete puntos: el empate ante el Barakaldo y los solitarios tantos de la victoria con Tudelano y Vitoria. La rentabilidad goleadora es una seña de identidad de esta UDL, no sólo de sus defensas.
La estrategia a balón parado fue bien explotada por la UDL de Pouso que, en sus dos primeros cursos en Logroño, contó con defensas goleadores. Los aficionados blanquirrojos recordaron la facilidad de Borja García para sumarse a las acciones a pelota parado o el acierto del sevillano Julio Rico en la estrategia.
Así, Borja García cerró el curso 2015-16 con cuatro goles anotados, cifra que bien pudiera igualar Bobadilla en lo que queda de curso. Los mismos firmó Amelibia, cedido por el Eibar y que ahora milita en el Ebro, en la infausta 2016-17.
En la 2014-15, hasta cinco defensas (Moisés, Sergio Martínez, Rico, Miguel Santos y Jacobo, que podía actuar de central o pivote) se sumaron al repertorio goleador.
Y, antes, en épocas no tan boyantes en lo clasificatorio, el central aragónes Gil también sacó de más de un quebradero de cabeza a la UDL con su cabeza.
Lander Olaetxea. / Clara Larrea
Olaetxea da el susto
Lander Olaetxea protagonizó el susto de la sesión matinal del miércoles. El futbolista de Durango no pudo completar el entrenamiento tras recibir un fuerte golpe, involuntariamente, del central Caneda.
El centrocampista abandonó las instalaciones del Mundial 82 con fuertes síntomas de dolor.
Olaetxea será sometido este jueves a diferentes pruebas médicas para determinar el alcance de un choque fortuito que trastocó la sesión matinal de trabajo de los logroñeses.
El ex del Gernika se ha consolidado en los planes de Sergio Rodríguez. Primero lo hizo como enganche y, tras la lesión de Andy, como el complemento ideal para Carles Salvador, el único centrocampista ‘sano’ de la UDL.
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