Luz verde al llenado de la presa de Enciso
Bárbara Moreno/ Logroño
El plan de llenado o la puesta en carga de la presa de Enciso, y de cualquier otra, depende de la implantación del Plan de Emergencia, y esta depende a su vez de cuando se reúna el Comité Nacional de Protección Civil para dar por implantado el Plan, y es una cuestión que se ha adelantado según los últimos planes que tenía la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). Desde esta entidad informaban esta semana a Noticias de La Rioja de que ya se ha constituido el comité para dar por ejecutado el Plan de Emergencia este mes, por lo que a partir de esa fecha se podrá empezar a llenar la presa en pruebas.
El delegado del Gobierno en La Rioja, José Ignacio Pérez, ya comunicó a los periodistas en el balance que hizo a los 100 días del Gobierno de Sánchez que se iba a empezar a llenar la presa antes de que acabara el otoño. Y parece que se van a confirmar estas fechas, y por tanto, a adelantar las anteriores previsiones de la CHEde comenzar a llenarse en 2019. ‘Va todo un poco más rápido sí’, reiteraron desde la CHE. Si bien todo está por ver, teniendo en cuenta que esta presa lleva años y años de atrasos por unas u otras cuestiones.
En cualquier caso, la puesta en carga de la presa no es el llenado definitivo del embalse, sino el de pruebas. De hecho, van llenando, observando todos los parámetros de seguridad, si pierde o no agua, y si por tanto hay fugas o filtraciones, si funcionan las salidas, los desagües, y van vaciando, y luego vuelven a llenar con más cantidad de agua. Todo depende de las lluvias, pero en un año normal, el llenado en pruebas de una presa como esta podría durar dos años. No obstante este es sin duda el paso más próximo de la infraestructura hidráulica para que ser real en toda su historial.
Desde la CHE insistían en que cada presa tiene un programa de puesta en carga, que define el proceso de llenado, sus fases y tiempo, «que luego está condicionado por las aportaciones en esa cuenca, en principio se habla de mínimo de dos años con caudal medio.
El embalse permitirá la regulación y el abastecimiento de agua a los municipios del Cidacos. La capacidad de almacenamiento del embalse será de los pequeños de la cuenca. Pero, con sus 47 hectómetros cúbicos, será mayor que el de Pajares (35,2) y el de González La casa en Ortigosa (32,9). Aunque será más pequeño que el de Mansilla (67,7). Además, la pared de presa, con una altura proyectada de 104,15 metros desde los cimientos (94,5 metros sobre el cauce), y de 375 metros de largo en su parte más alta, es de las pocas de la cuenca del Ebro que pasa de 100 metros.
La variante, abierta desde junio
La Confederación Hidrográfica del Ebro, organismo adscrito al Ministerio de Transición Ecológica (MITECO), abrió en junio al tráfico los 7 kilómetros de la variante LR-115 (en su tramo de La Rioja) y SO-615 (en su tramo de Soria), una vez finalizados los trabajos para su construcción. Con estos trabajos concluidos, el siguiente paso de gran importancia era el de implementar el Plan de Emergencia de la presa, para poder empezar a llenarla, que es en lo que se está trabajando ahora con celeridad.






