La guardería Ding-Dong acogerá en un único edificio el primer centro juvenil y ludoteca
FELI AGUSTÍN / LOGROÑO
Con el objetivo de convertirse en un referente de conciliación para las familias de la ciudad, sede del Consejo de Infancia, recurso de apoyo al asociacionismo y vivero de iniciativas para niños y jóvenes, el barrio de Siete Infantes de Lara contará con la primera infraestructura que integrará, en las mismas instalaciones, ludoteca y centro joven para chavales de 4 a 17 años.
En concreto, esta novedosa dotación se ubicará en la antigua guardería Ding-Dong, construida en suelo municipal en 2004 y cerrada en 2015 tras cesar su actividad por lo que, según las cláusulas del acuerdo, ha revertido al Ayuntamiento.
Ha sido la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, quien informó de que se espera que el centro -el número 14 de la red- esté en funcionamiento el próximo verano. «Cumplirá nuestro objetivo de apoyar a la familia, fomentando la conciliación y la formación a los jóvenes», afirmó Gamarra, quien avanzó que el centro ofrecerá actuaciones de carácter innovador. De hecho, informó de que para el diseño de los contenidos se cuenta con la participación de padres, jóvenes, técnicos municipales, asociaciones y empresas privadas del ocio y la educación.
Las actividades
Así las cosas, el programa se centrará durante los meses de verano en servicios más convencionales bajo el sello de conciliación -como los de una ludoteca o centro joven en vacaciones- y el resto del año se persigue que plantee otras propuestas, sirva de referente para el asociacionismo en la ciudad o funcione a modo de vivero para iniciativas empresariales dirigidas a la infancia en su fase embrionaria. También está previsto que se desarrolle desde este local la gestión de la Red de Puntos de Información que hay establecida en institutos y centros jóvenes.
La proximidad al Parque Infantil de Tráfico del Ayuntamiento es también una circunstancia que se tendrá en cuenta a la hora de convocar una oferta atractiva para niños y adolescentes, «siempre sobre una perspectiva lúdica pero también formativa».
Se pretende que este nuevo centro suponga un espacio de referencia para los niños y sus familias, desde un punto de vista lúdico (ocio educativo, activo y creativo, que potencien sus centros de interés y posibiliten la participación e implicación) pero también formativo, participativo, socializador y de crecimiento personal, según la memoria de la Unidad de Infancia y Juventud.






