San Mateo aparece ya en el horizonte y para muchos logroñeses es el momento de fijar rumbo en la agenda viajera para esos días festivos. La agencia Eurorioja Viajes (Calle Portales 3, Logroño. Teléfono 941 26 17 17) propone para esa salida vacacional Bulgaria, un destino que conjuga innumerables atractivos: Historia, naturaleza, cultura…y buenos precios.
Eurorioja aprovecha el próximo San Mateo para ofertar un viaje a una de las más grandes joyas ocultas de Europa. Bulgaria ES un país rico en historia y naturaleza, con una buena infraestructura, montañas impresionantes, bosques casi vírgenes, monasterios antiguos y ciudades que mezclan la cultura balcánica con la arquitectura soviética más interesante.
Limita al norte con Rumanía, al sur con Turquía y Grecia, y al oeste con Serbia y Macedonia. Al este se encuentra el Mar Negro, límite natural del país. Su capital, Sofía, es una mezcla de iglesias ortodoxas, amplias avenidas, parques y edificios y tiene una de las vidas nocturnas más animadas del antiguo bloque comunista.
La historia de Bulgaria es, como la de casi todos los países del Este, turbulenta. Es un crisol de civilizaciones y culturas y su influencia se percibe aún hoy en día. Tras la II Guerra Mundial, Bulgaria se convirtió en un estado socialista y estuvo bajo la influencia de la Unión Soviética. En 1989, tras el desmantelamiento de los estados socialistas y la caída del muro de Berlín el país se convirtió a una democracia parlamentaria.
Bulgaria es un país con una gran riqueza histórica y un amplio legado dejado por antiguas civilizaciones, por lo que tiene mucho que ofrecer a los huéspedes que tengan interés en la historia, la cultura, la etnografía, la religión, la arquitectura y el arte. A pesar de que Bulgaria ocupa sólo el 2% del territorio de Europa en este país hay cerca de 40 000 monumentos históricos registrados (7 de los cuales son Patrimonio de la Humanidad por la Unesco), hay 36 reservas culturales, 160 monasterios, alrededor de 330 museos y galerías.
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Sofía. Paseo por su casco histórico para conocer lo más destacado del amplio patrimonio cultural de la capital búlgara: Catedral ortodoxa Alexander Nevski; plaza de Sveta Nedelia; rotonda romana de San Jorge, del siglo IV y una de las más antiguas de los Balcanes; iglesias de San Nicolás, Santa Petka y Santa Sofia; Universidad Climent Ohridski; Galería Nacional de Arte (anterior residencia de los zares) o el teatro Ivan Vazov. Museo Nacional de Historia, con una importante colección del famoso tesoro de los tracios, uno de los más antiguos del mundo. Iglesia de Boyana (Patrimonio de la Humanidad) con sus famosos frescos, precursores del renacimiento europeo.
Monasterio de Rila. Situado al sur, a 130 kilómetros de Sofía. Espectacular Monasterio, principal centro de la cultura cristiano-ortodoxa búlgara y el más grande del país. Su interior está ricamente decorado con pinturas y frescos de gran valor artístico y simboliza la preservación de la identidad cultural búlgara durante la ocupación otomana.
Plovdiv. En su centro histórico, barrio renacentista, con edificios de los siglos XVIII y XIX, muestras de las mejores arquitecturas del renacimiento búlgaro. Ruinas tracias y romanas. Teatro romano que se remonta a la época del emperador Trajano, dos casas renacentistas búlgaras y la iglesia de San Konstantino y Santa Helena.
Nesebar. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. La ciudad antigua de Nesebar destaca por sus murallas bizantinas, el Museo Arqueológico y antiquísimas iglesias. Es la capital de la costa sur búlgara.
Kazanlak. La ciudad de Kazanlak, conocida por el famoso Valle de las Rosas. Tumbas tracias encontradas en el valle de Kazanlak, eMuseo Etnográfico-Arqueológico de Kazanlak, con interesantes muestras y objetos de la cultura tracia, la ruta hacia Shipka, con su principal monumento, la iglesia rusa de Shipka y llegar a Veliko Tarnovo (capital medieval del segundo reino búlgaro). Sin duda una de las ciudades más bellas y pintorescas del país por su ubicación sobre las laderas de varias colinas atravesadas por el río Yantra.
Veliko Tarnovo (Arbanasi). Es interesante dar un paseo a pie por el centro histórico, donde destacan, la calle Samovodska Chershiya con sus artesanos, las iglesias ortodoxas del casco viejo, la calle Gurko o el Museo de Historia y la fortaleza Tsarevets en las colinas Sagradas, antigua capital y residencia de los zares búlgaros. En el pueblo de Arbanassi, iglesia de la Natividad del siglo XVI y XVII y la casa de Konstanzakiev.
Monasterio de Troyan (Sofía). Uno de los más importantes del país y está situado en una zona de gran belleza natural.
