La Comunidad Musulmana acusa de falsedad documental a Educación

La Comunidad Musulmana de La Rioja denunció el lunes que la Consejería de Educación ha cometido «falsedad documental» al indicar que de enero a mayo de 2017 hubo 39 solicitudes para recibir enseñanza religiosa islámica en la región, ya que, según sus datos, solo en Calahorra se presentaron 44 a fecha de 11 de febrero.

Así lo afirmó la miembro de esta comunidad, Marian Aretio, en una rueda informativa, en la que señaló que, según datos extraídos del registro de la Delegación del Gobierno de La Rioja, esas 44 solicitudes son amparadas por 88 alumnos, pero, en el listado aportado por Educación no aparece Calahorra.

Detalló que, según el documento de esta consejería, en el Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Nuestra Señora de la Vega de Haro hubo una única solicitud, mientras que, según sus datos, en febrero de 2017 había 7 solicitudes que amparaban a 15 alumnos.

En el CEIP Beato Jerónimo Hermosilla de Santo Domingo de la Calzada hubo 16 solicitudes de acuerdo con Educación, pero, en el registro de la Delegación aparecen, a fecha de 11 de febrero de ese año, 24 solicitudes que avalan a 41 alumnos, recalcó.

«No solo se engaña a la Comunidad Musulmana, se está engañando al Tribunal Superior de Justicia de La Rioja, que, en base a estos datos, está fallando negativamente un derecho fundamental, y también está mintiendo al Parlamento de La Rioja, donde se le han de exigir responsabilidades al consejero de Educación, Alberto Galiana», manifestó.

Sentencias desestimatorias

En base a estos datos aportados por la Consejería, el Tribunal Superior de Justicia ha desestimado en tres sentencias, dos en Haro y una en Calahorra, recursos contenciosos-administrativos que piden la impartición de la asignatura de educación islámica en colegios.

Aretio subrayó que esta sentencias, en las que «se deniega el derecho fundamental de estas familias solicitantes a la enseñanza religiosa islámica en sus colegios, se motivan en unos documentos manipulados y que suponen una falsedad documental por parte de la Consejería de Educación».