La oposición llama a un frente común por la alta velocidad hasta Castejón

Feli Agustín / Logroño

El anuncio realizado el miércoles de la semana pasada en Logroño por el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, de que no habrá infraestructura ferroviaria de AVE entre Logroño y Castejón -aunque, eso sí, se procederá a una intervención integral en la vía- no ha dejado de suscitar un amplio rechazo. El miércoles fueron tres partidos de la oposición municipal, PSOE, Ciudadanos y PR, los que se manifestaron en contra de una medida que, entienden, coloca a La Rioja en una «isla de comunicación», hurtándole posibilidades competitivas.

Los portavoces de los tres grupos, Beatriz Arraiz, Julián San Martín y Rubén Antoñanzas, apelaron a un «frente común» de rechazo a los planes del Ministerio que incumple el Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda (PITVI) 2012-2024, y «excluye» a La Rioja del corredor Cantábrico-Mediterraneo. Para ello, de momento y como primera actuación, presentarán una moción conjunta en el pleno municipal que mantenga la planificación prevista en el PITVi con financiación adecuada para la «completa» ejecución del tramo Zaragoa.Castejón-Logroño-Miranda.»Es una pésima noticia, que muestra el ninguneo al que el Ministerio somete a La Rioja», considera el regionalista Rubén Antoñanzas, quien entiende que es el momento de «movilizarse» para revertir esta decisión.

La segunda peor noticia

Julián San Martín, portavoz de Cs, criticó el «servilismo» del que, en su opinión, hicieron gala tanto la alcaldesa de Logroño como el presidente riojano ante la «segunda peor noticia» que en materia de infraestructuras ha sufrido La Rioja este siglo, tras la prórroga del contrato de la autopista.

«Hay que decir que el PP está dejando sin futuro y sin conexión a las empresas riojanas al sacar la región del corredor ferroviario, mientras ríen las gracias del Ministerio», aseguró, argumento que compartió la socialista Beatriz Arraiz, quien coincidió en criticar la «complacencia» mostrada por la alcaldesa. «El PSOE no quiere que Logroño sea una estación término y quede al margen de la conexión con zonas estratégicas, como el País Vasco y Levante», dijo.