El 91% enfermeras riojanas sufren estrés por falta de personal, según un estudio

Efe / Logroño

El 91 por ciento de las enfermeras riojanas sufren situaciones de estrés derivadas de la sobrecarga de trabajo que provoca la falta de personal en los diferentes servicios, donde se acumula una pérdida de más doscientas profesionales en los últimos años.

Esta es una de las conclusiones de un estudio hecho por el sindicato de enfermería SATSE en toda España, denominado ‘Percepción de estrés de los Profesionales de Enfermería en España. Comparativa 2012-2017’ del que este jueves ha informado la secretaria autonómica en La Rioja de esta entidad, Marta Saenz-Torre.

Ha detallado los puntos específicos de La Rioja en la encuesta realizada entre enfermeras, de las que el 75% de las enfermeras cree que sus condiciones de trabajo se han deteriorado en los últimos años a consecuencia de los recortes.

Cerca del 60% considera que la atención que se presta en su unidad ha empeorado; el 91,67% dice que no hay personal suficiente en su unidad para prestar la atención más adecuada, con lo que y el 75% no tiene tiempo suficiente para prestar a sus pacientes la atención más adecuada.

Asimismo, muchos profesionales manifiestan dolencias y síntomas físicos; un 96% ha padecido alguna vez tensión muscular; un 90%, nerviosismo, temor o angustia; un 44% sufre problemas sexuales, y un 85% tiene trastornos del sueño.

SATSE pide invertir en recursos humanos y materiales

Ante estos datos SATSE pide a las administraciones públicas «que realmente demuestren que la crisis ha pasado e inviertan en los recursos humanos y materiales para mejorar la atención sanitaria y las condiciones de los profesionales».

Saenz Torre ha incidido en que «de manera urgente, hay que aumentar las plantillas en todos los servicios de salud» y ha explicado que en La Rioja antes de la crisis «había una plantilla de mil profesionales de enfermería en atención especializada» y «ese número se ha mantenido» pero «esa cifra iba a acompañada de otras 200 enfermeras en distintas funciones, que se perdieron».

Así, ha detallado, como ejemplo, en los controles de enfermería del Hospital San Pedro se redujo el número de profesionales en cada turno, lo que repercute en la atención que prestan a los enfermos y en su propio estrés.

También provoca que muchas no hayan terminado sus funciones cuando concluye su horario de trabajo, con lo que reclaman que se les reconozca el tiempo extra que realizan en sus puestos.

«Queremos medios que para estas situaciones dejen de ocurrir y la forma de ponerlos es con convocatorias de empleo masivas», ha afirmado la secretaria general de SATSE en La Rioja.

Jornada de 35 horas

Además reclaman que se recupere una jornada de 35 horas semanales, la implantación de un itinerario laboral y un sistema especial de jubilación; la generalización del solape de jornada, y el desarrollo de entornos de trabajo seguros, impulsando las acciones contra las agresiones y los accidentes laborales.

Porque las enfermeras riojanas «están agotadas, tienen problemas de salud y la sensación de que no pueden hacer bien su trabajo pro estas cuestiones», ha concluido.

A nivel nacional, ha explicado, la mitad de los profesionales de enfermería sufren el síndrome del profesional ‘quemado’ y ocho de cada diez, estrés, mientras que cerca de nueve de cada diez considera que el ambiente laboral se ha deteriorado y siete de cada diez está convencido de que la atención que se presta a los pacientes en nuestro Sistema Sanitario ha empeorado en los últimos años.