Luz al final del túnel
Treinta y siete días ha tardado el Promete en festejar su primera victoria en la Liga Femenina, en una campaña que se torció antes de que el balón empezara a rodar en Magariños el pasado 30 de septiembre.
Las riojanas, huérfanas de victorias después de seis derrotas consecutivas, superaron este domingo al Estudiantes (68-62), para trasladar a las madrileñas la condición de colistas en solitario.
Estaba en juego la supervivencia en la elite femenina y las de Elorduy, lideradas en la anotación por Knezevic (16 puntos)y Paula Estebas (13), superaron esta anticipada final ante un Estudiantes que, en su debut en la Liga Femenina, todavía no conoce la victoria.
El triunfo no evita los problemas clasificatorios de las riojanas -penúltimas, aunque sólo el basketaverage impide superar al Zamora, rival directo por la permanencia- pero al menos permite ver la luz al final del túnel.
Eso sí, para abandonar las posiciones de descenso el equipo de Jorge Elorduy necesita mejorar su defensa.
Las riojanas tienen la segunda peor defensa de la liga (545 puntos recibidos, 78 por encuentro), sólo empeorada por el Estudiantes (549). Por su parte, el Promete cuenta con el décimo mejor ataque de la categoría, con 449 puntos anotados desde e






