El triángulo Berceo-Murrieta- Medrano será a 30 km/hora a mediados de 2018

Feli Agustín / Logroño

Seguir dotando a la ciudad de más zonas pacificadas para posibilitar un uso eminentemente residencial, donde convivan peatones, bicicletas y vehículos de una forma segura para «seguir siendo un ciudad sostenible» es el principal objetivo de la actuación «integral» que emprenderá el Ayuntamiento de Logroño desde principios del año próximo en la zona oeste.

La alcaldesa, Cuca Gamarra, presentó el martes a vecinos y comerciantes el proyecto definitivo de un actuación que convertirá en zona de circulación a 30 kilómetros/hora a las calles comprendidas en el triángulo Gonzalo de Berceo, Murrieta y Carmen Medrano.

«Buscamos dar mayor protagonismo a los peatones, puesto que las zonas pacíficas favorecen el encuentro social y un reparto más equitativo del espacio público entre distintos usuarios, por lo que se recupera la calle como lugar de convivencia», argumentó la alcaldesa, quien informó de que las obras salen con un presupuesto de licitación de 342.000 euros, con la intención de que comiencen en el primer trimestre de 2018 con un periodo de ejecución de cuatro meses.

La actuación

La creación de esta área pacificada, incluida del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), contempla también la creación de orejas mediante la ampliación de anchura de las aceras existentes en la zona de paso de peatones en la confluencia de Ramírez de Velasco con las calles Gonzalo de Berceo, Valcuerna Conde Superunda y Marqués de Murrieta.

Se peatonalizará la calle Beratúa (en el tramo comprendido entre Murrieta y Gonzalo de Berceo) que se transformará en una calle residencial, mediante plataforma única; y se concluirá la peatonalización de Valcuerna, actuando entre las calles Beratúa y Ramírez de Velasco. Igualmente, se protegerán las aceras en la zona del colegio Milenario de la Lengua, en cuya entrada se ampliará la zona estancial, disminuyendo las plazas de aparcamiento de coches, aunque aumentan las de bicis o motos.

Asimismo se constituye la unión física de la zona de actuación con el parque del Oeste, creando un itinerario peatonal único y sin obstáculos.

Los objetivos

La actuación en la zona oeste es enmarca en la filosofía que defiende el equipo de Gobierno de ir ganando espacio para los logroñeses. Así lo reiteró ayer la alcaldesa, quien apuntó que este objetivo principal se completa con otra serie de propósitos para aumentar la calidad de vida de los ciudadanos. Así, citó que se pretende también evitar el tráfico pesado con la reducción de la velocidad y la creación de circuitos cerrados de circulación que disuaden a los conductores con itinerarios de largo recorrido de utilizar el viario interno de la zona 30 como atajo.

Incrementar la seguridad vial, con la reducción de la velocidad; el descenso de la contaminación y el consumo de combustible y el aumento consecuente de la eficiencia energética son también fines de esta actuación.

Áreas pacificadas

En 2014 comenzaron los trabajos para la creación de diferentes áreas pacificadas en la ciudad. Concretamente, serán siete zonas de Logroño en las que se actuará: Gran Vía, Pérez Galdós, Chile y República Argentina; Pérez Galdós, Huesca, Chile y República Argentina; Avenida de la Paz, Madre de Dios, Luis de Ulloa y circunvalación; el entorno del CEIP Vicente Ochoa; entorno del CEIP Bretón de los Herreros; entorno al ayuntamiento y Escuela de Arte.