Incertidumbre entre los trabajadores riojanos del Banco Popular
Bárbara Moreno / Logroño
La adquisición del Banco Popular por el Banco Santander por el módico precio de un euro (como valor simbólico) crea una gran incertidumbre entre los trabajadores de la entidad. En La Rioja hay un total de 11 sucursales de Banco Popular y 48 trabajadores. «Hace apenas unos meses ya se vivió un ERE, y ahora esto», lamentaba el miércoles Urbano Beriaín, representante del área de banca del sindicato UGT, quien aseguraba que no entendía como este banco que había sido el más rentable de Europa se encontraba en esta situación de quiebra.
En este sentido, desde el sindicato consideraban que el problema de Banco Popular se debía a una dejación del Banco de España.
Beriaín indicaba que aún el miércoles no les habían comunicado a los trabajadores de Banco Popular en La Rioja cuál iba a ser su futuro. Pero, obviamente, se temen un nuevo ERE. El banco Santander cuenta con 21 entidades en La Rioja, y no parece nada claro que vayan a dejar abiertas otras 11 que acaban de adquirir. «Y menos en ciudades pequeñas».
En cualquier caso, Beriaín reiteraba que no saben «nada de nada», que están a la espera, y que todo son suposiciones. Pero reconocía que en La Rioja, por ser una Comunidad pequeña el problema es mayor «porque se están perdiendo muchas entidades y directamente muchos vecinos de pueblos pequeños, pero ya no de 100 y 200 habitantes, sino de muchos más. Los vecinos se están quedando sin servicios o se van a quedar sin ellos próximamente». «Cada vez se trabaja más online y hay menos sucursales. Los bancos van de ERE en ERE y ya no hay prejubilaciones», añadía.
Los accionistas lo pierden todo
Lo único que tienen claro es que los accionistas del Banco Popular perderán el 100% de su inversión en las acciones de la entidad tras el traspaso de todo el capital. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha decidido suspender la cotización del Popular, que había perdido más de la mitad de su valor en Bolsa (en las últimas cinco sesiones).
Pero hoy, sus acciones valen cero, ya que las autoridades europeas las han dado de baja o amortizado. Los inversoras podrán intentar pleitear contra la anterior entidad.
Se desconoce el número de accionistas que pueda haber en La Rioja, indica Beriaín, «pero no serán pocos, este Banco tuvo un gran momento de esplendor».
Uno de los accionistas perjudicados por la situación del banco es el empresario riojano Félix Revuelta, propietario de la firma Naturhouse y presidente de la UDL, que ha podido perder hasta 45 millones de euros en acciones.






