2.425 riojanos cobran entre 430 y 672 euros al mes de renta de ciudadanía
Un total de 2.425 personas perciben actualmente la renta de ciudadanía en La Rioja, con cuantías que oscilan entre los 430,27 y los 672,30 euros mensuales; se ha denegado a 294 y se ha informado sobre esta prestación social a 5.523.
Estos datos los ha facilitó ayer el consejero de Políticas Sociales, Conrado Escobar, quien presidió la Comisión de Seguimiento de la Renta de Ciudadanía, con presencia de miembros del Gobierno regional, CCOO, UGT, Federación Riojana de Municipios (FRM), Federación de Empresarios de La Rioja (FER), Colegio Oficial de Trabajo Social y Consejo Sectorial de Exclusión Social.
El consejero incidió en que todas las solicitudes de renta de ciudadanía están siendo pertinentemente tramitadas por los técnicos del Servicio de Prestaciones de la Dirección General de Servicios Sociales. «Una gestión que se está llevando a cabo con cercanía y atención a las necesidades de los ciudadanos, pero también con la rigurosidad y responsabilidad que exige una cuestión de este calado, ya que estamos hablando del dinero de todos los riojanos», aseguró.
Explicó que, con el fin de ofrecer el mejor servicio a los ciudadanos, se ha establecido un punto de información específico sobre la renta de ciudadanía, donde se ha atendido de forma personal a 5.523 personas. Además, se han impulsado, hasta ahora, 794 proyectos de inserción, de los que 544 de tipo laboral y 250 son de ámbito social.
Escobar calificó como «muy diverso» el perfil de los perceptores de la renta de ciudadanía, dado que un porcentaje corresponde a personas que ya eran beneficiarias de prestaciones de inserción, como el Ingreso Mínimo de Inserción (IMI) y la Ayuda de Inclusión Social (AIS), quienes, en muchos casos, tienen «gran vulnerabilidad o están en situación de exclusión». Otro perfil es el de personas que, a causa de la reciente crisis económica, quedaron al margen del mercado laboral y su edad ha dificultado su reincorporación al mismo, a l que se suman muchos casos de beneficiarios que compatibilizan el cobro de la renta con un empleo a tiempo parcial.
«La renta de ciudadanía supone un nuevo modelo de contrato social, un avance en las prestaciones sociales», según el consejero, para quien, así, el beneficiario, además de percibir la renta, tiene el derecho y la obligación de participar en un proyecto individualizado de inserción con el objetivo de que la renta se convierta, así, en ventana al empleo y, por tanto, «a una inclusión social efectiva y duradera». La consecución de un empleo se consigue, añadió Escobar, gracias a la estrecha colaboración entre los técnicos de las áreas de Servicios Sociales y de Empleo, que determinan el itinerario.






