El Ayuntamiento avanza actuaciones en los PERIs de la zona oeste
Feli Agustín / Logroño
En presencia de representantes de la Federación de Vecinos y la Asociación de Vecinos de Yagüe, los cinco grupos municipales volvieron el jueves a coincidir, al igual que sucedió hace un año, sobre la necesidad del desarrollo ordenado de las zonas afectadas por los PERIs (Plan Especial de Reforma Interior) aprobados en 1992, que contemplaban la reconversión de determinadas zonas entonces industriales en residenciales en un plazo de 24 años -que obligaba, por tanto, a las empresas a abandonar sus emplazamientos- y que vencieron, consecuentemente, en 2016.
Fue una moción de Ciudadanos (Cs) la que llevó ayer el asunto al pleno, aunque lo delimitó a cuatro PERIs de la zona oeste, el nº 8 de la calle Los Fueros, el nº 9 de Avenida de Burgos, el 10 de General Yagüe y el 12 de Paula Montal con la intención de «dar un empuje», según su portavoz, Julián San Martín, para solucionar un asunto que el resto de los grupos coincidió en que merece una respuesta urgente.
Compaginar intereses
Con la opinión unánime de que hay que conciliar un desarrollo urbano ordenado con las necesidades de los vecinos y las empresas afectadas, el responsable de Urbanismo, Pedro Sáez Rojo, anunció novedades para abordar «un planteamiento integral» para los 17 PERIs pendientes –algunos todavía no han expirado-, y avanzó próximas actuaciones en la acera norte de Avenida de Burgos y la instalación transitoria de un paso peatonal en la calle Eibar.
Además, Sáez Rojo, que contó que ha mantenido varias reuniones con vecinos implicados, explicó también que «se está trabajando» con empresas en la búsqueda del emplazamiento más adecuado, aunque apuntó que hay que solventar algunas dudas jurídicas –que planteó también el concejal de Cambia, José Manuel Zúñiga- sobre el derecho del Ayuntamiento a derribar pabellones privados.
La alcaldesa, Cuca Gamarra, quien aseguró que el trabajo que al respecto está desarrollando el equipo de Gobierno hace más de un año no puede «cuestionarse ni negarse», recordó que los PERIs fueron el instrumento que se eligió para permitir el crecimiento de la ciudad y, que en su opinión, han permitido un desarrollo «sostenible, ordenado y equilibrado».
«No se puede cuestionar por situaciones puntuales algo que ha funcionado bien durante décadas y con varias corporaciones», consideró la alcaldesa, quien constató que la crisis ha paralizado ciertas actuaciones.
«Apoyamos una moción que suma en un tema de ciudad, y en el que hemos remado juntos, una postura en la que debamos seguir, pero teniendo en cuenta que hay asuntos delicados que afectan a empresas», concluyó la primera edil.
Los toros toman el ruedo
Una proposición de Cambia Logroño, que no salió adelante, generó un encendido debate en el pleno municipal, con alusiones incluidas a varios papas. José Manuel Zúñiga propuso que se eliminaran subvenciones para espectáculos taurinos, aunque no las corridas de toros, y un debate sobre si se deben seguir permitiendo dichos espectáculos, como las vaquillas.
El concejal de Festejos, Miguel Sáinz, que se confesó amante del mundo del toro, negó que el Ayuntamiento subvencione espectáculos taurinos –afirmación que refrendó el socialista José Luis Díez Cámara- y valoró los valores culturales y económicos que encierra. Consideró que no es necesario abrir un debate sobre las vaquillas, donde «no se produce maltrato, y si lo hay, se sanciona», aunque sí concedió que se subvencionan con 3.000 euros actividades de peñas taurinas, desde concursos de relatos hasta de pintura a visitas a dehesas.






